El Gobierno nacional estaría evaluando reinstalar los “tickets canasta”, un mecanismo emblemático de los años 90 que podría volver como parte de la nueva reforma laboral que el Ejecutivo planea enviar al Congreso.
El objetivo, según fuentes oficiales, es reactivar el empleo formal, reducir costos empresariales y ofrecer beneficios sociales no remunerativos dentro de los salarios.
Cuánto del sueldo podrían suplir estos tickets
Según detalló el medio especializado IProfesional, algunos empresarios proponen en la discusión sobre la reforma laboral, que tendría en cuenta los salarios dinámicos, que esta podría incluir vales alimentarios que no paguen cargas sociales y que puedan suplir hasta 20% del salario, como ocurría con los viejos tickets canasta o luncheon tickets para los empleados de convenio.
Cómo eran los tickets canasta en Argentina
El sistema, que se aplicó por primera vez en 1989 durante la hiperinflación, consistía en vales alimentarios que las empresas entregaban a sus empleados para cubrir parte del sueldo. Esa porción no se consideraba salario a efectos de aportes previsionales, aguinaldo o indemnizaciones, lo que permitía a las firmas aliviar su carga impositiva. En su momento, el esquema alcanzó a más de 1,5 millón de trabajadores y representó unos 4.000 millones de pesos anuales.
La medida fue eliminada en 2007 con la Ley 26.341, que integró los vales al salario remunerativo. Luego, en 2009, la Corte Suprema de Justicia ratificó que los tickets canasta “forman parte del sueldo”, al considerarlos una contraprestación directa al trabajo.

Un regreso con ajustes y promesas de transparencia
Desde el Gobierno aseguran que una versión “actualizada y transparente” de este sistema podría incentivar la formalización laboral, mejorar el acceso a bienes básicos y aliviar los costos para las empresas. Sin embargo, los sindicatos alertan que se trata de un retroceso en derechos laborales, ya que podría reinstalar una segmentación salarial y afectar los aportes jubilatorios y la antigüedad.
“Los tickets canasta fueron una forma de precarización encubierta. No podemos volver a un sistema que fragmenta los salarios y debilita la seguridad social”, señalaron dirigentes gremiales consultados por distintos medios.
Cómo funcionan los sistemas similares en otros países
La iniciativa argentina toma referencia de modelos internacionales que combinan beneficios fiscales con regulaciones laborales:
- México: los “vales de despensa” representan entre el 4% y el 12% del salario y son deducibles de impuestos, aunque no pueden reemplazar el sueldo mínimo.
- Colombia: permite pagar hasta el 50% del salario en especie, con límites del 30% para quienes ganan el mínimo.
- Brasil: el Programa de Alimentação do Trabalhador (PAT) ofrece vales y comidas subsidiadas con beneficios fiscales.
- España y Francia: los “cheques restaurante” y “tickets restaurant” están exentos de impuestos hasta 11 euros diarios, gestionados mediante tarjetas electrónicas y con control estatal.
- Italia: aplica los buoni pasto, con un tope libre de impuestos de 8 euros por día.































