El presidente, Javier Milei, presentó este domingo el proyecto de Ley de Presupuesto 2025 con un discurso de tono político, sin precisiones económicas y bajo el postulado del equilibrio fiscal como base irrenunciable para sentar las bases de la recuperación de la Argentina.
El presidente defendió las políticas libertarias y su gestión al frente del Poder Ejecutivo, al tiempo que volvió a atacar a la “casta política” y embistió contra la oposición con foco en el kirchnerismo.
El jefe de Estado remarcó que tomó la decisión de presentarse personalmente a entregar el primer presupuesto de su gestión porque a su entender “el destino de un pueblo se juega en las decisiones económicas que toma”.
Ataviado con la banda presidencial y el bastón de mando, el presidente llegó al Parlamento minutos después de las 21 acompañado por la secretaria general de la presidencia, Karina Milei, y fue recibido por la vicepresidenta, Victoria Villarruel, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, el jefe del bloque de Diputados de La Libertad Avanza, José Luis Espert y el jefe del bloque de Senadores, Ezequiel Atauche.
El atril desde donde pronunció su discurso fue ubicado delante del estrado del presidente de la Cámara de Diputados replicando la misma escenografía del 1° de marzo cuando abrió las sesiones ordinarias.
Detrás suyo en el estado principal se ubicaron Villarruel, Menem, Atauche, Espert, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el secretario de Hacienda, Carlos Guberman. Estos dos últimos serán los responsables de defender el proyecto en las próximas semanas.
Tras entonarse el Himno Nacional, Milei inició su alocución que se extendió por espacio de 40 minutos, lejos de la hora y media que había trascendido en un principio y en un recinto que lucía semivacío por la ausencia de legisladores de la oposición.
En las afueras del Parlamento hubo un discreto operativo policial sobre la calle Rivadavia, dado que no hubo movilizaciones a favor por parte de grupos libertarios, ni tampoco de rechazo por parte de la oposición.
El ingreso al Palacio fue celosamente custodiado por agentes de la PSA (Policía de Seguridad Aeroportuaria) y los palcos habitualmente reservados a la prensa acreditada estuvieron vedados.
Los periodistas fueron corridos hacia locaciones laterales, mientras que sus lugares habituales permanecieron cerrados con cortinados por decisión de Casa Militar, que alegó motivos de seguridad.
El resto de los palcos disponibles se plagó de invitados. En uno de los centrales se ubicaron los padres de Milei (Norberto y Alicia) y su pareja, Amalia “Yuyito” González.
En la bandeja derecha se sentaron los ministros y secretarios: Guillermo Francos (Jefe de Gabinete), ya repuesto de su dolencia, Patricia Bullrich (Seguridad), Luis Petri (Defensa), Mario Russo (Salud), Mariano Cúneo Libarona (Justicia), Federico Sturzenegger (Transformación y Desregulación del Estado), y el vocero presidencial Manuel Adorni, entre otros. Allí también estuvieron los funcionarios del área económica, entre ellos el viceministro de Economía, José Luis Daza, el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, y la titular de la AFIP, Florencia Misrahi.
Unos 28 representantes del PRO acompañaron la presentación y en principio apoyarían el proyecto con la única condición de que se incluya la devolución de la coparticipación a la Ciudad de Buenos Aires.
Salvo el Frente de Izquierda, que no asistió para no convalidar lo que consideraron un “circo” y los senadores de Unión por la Patria, que tampoco asistieron, todos los bloques enviaron representantes. Luis Juez, jefe del bloque de senadores PRO, estuvo en primera fila.
El bloque de senadores de Unión por la Patria había decidido no ir a la presentación, pero en el recinto se hizo presente un integrante, Guillermo Andrada, de la provincia de Catamarca, lo cual puede leerse como una señal política del gobernador peronista Raúl Jalil.
Un dato que no pasó desapercibido fue la ausencia de senadores de la UCR. Milei los había cuestionado la semana pasada cuando acompañaron el rechazo al DNU que incrementó los fondos reservados para inteligencia. En cambio, sí hubo representantes de diputados, encabezados por el cordobés Rodrigo De Loredo.
No hubo presencia de miembros del Poder Judicial, en especial de la Corte Suprema, ni tampoco de gobernadores.
Milei cargó contra el kirchnerismo
Uno de los momentos más picantes de la presentación fue cuando Milei chicaneó a los diputados de Unión por la Patria y mandó a “tomar nota” al jefe del bloque, Germán Martínez, que le contestó a los gritos mientras desde los palcos bajaba el cántico “la casta tiene miedo, la casta tiene miedo”.
Muchos de los pasajes de su discurso, Milei los leyó mirando de forma desafiante hacia el sector de Unión por la Patria. “¡No vuelven más!”, gritó en un momento la diputada libertaria Juliana Santillán.
También enumeró una serie de acciones que consideró “logros” por parte del Gobierno y los atribuyó a la “gestión”, en alusión a algunos cuestionamientos que surgieron especialmente desde sectores del macrismo.
Asimismo, se hizo un espacio para responderle a la exmandataria Cristina Kirchner al repetir su frase de cabecera: “La inflación es siempre y en todo lugar un fenómeno monetario”. CFK en un reciente acto en Merlo había cuestionado esta teoría, tras plantear el bimonetarismo de la economía argentina.
Tras lo sucedido esta semana con la aprobación de la ley de Financiamiento Universitario, Milei envió un mensaje claro al Congreso: “Vetaremos todos los proyectos que atenten contra el equilibrio fiscal porque no vamos a ser cómplices de estafar a los argentinos con medidas populistas”.
Y añadió que: “El único contexto en el que aceptaremos discutir el aumento de un gasto es cuando el pedido venga con una expresa explicación de qué partida hay que reducir para cubrirlo”.
“Cambio de época”
En otro tramo de su discurso, Milei dejó trascender que Argentina podría recuperar su capacidad de acceso al crédito a partir de su orden macroeconómico.
El presidente recalcó su visión liberal en la concepción del Estado y sostuvo que: “Lo fundamental que tiene que hacer un Estado nacional es asegurar la estabilidad macroeconómica y el imperio de la ley. Punto”.
En ese sentido remarcó que: “Cualquier otra cuestión puede resolverse a través del mercado, o es competencia de los gobiernos sub-nacionales (provincias)”.
Milei destacó también que se transita un cambio de época y enfatizó que “los argentinos son un pueblo rebelde y cansado de las avivadas de los políticos. Estamos viviendo un momento bisagra en la historia argentina. No lo subestimen”.
En ese sentido instó a los miembros del Congreso Nacional a que acompañen su iniciativa a la que consideró “diametralmente opuesta” a la que se utilizó en la historia económica del país porque parte del equilibrio presupuestario para luego asignar el resto de las partidas.
“Sepan ustedes, miembros de este honorable Congreso, que la decisión de qué lado de la historia quieren permanecer es suya. Luego será la ciudadanía quien los coloque en la avenida de los justos, o en la esquina de los mezquinos que apostaron contra el país y su gente”, remató el presidente.