La reforma laboral volvió a instalarse en el centro del debate político. Según reveló Eduardo Feinmann, un borrador interno ya circula dentro del Gobierno con cambios sensibles en indemnizaciones, vacaciones, salarios y jornadas laborales. Aunque no es el proyecto final, el documento marca el rumbo que el oficialismo quiere llevar al Congreso.
El dato clave que Feinmann anticipó: el nuevo tope indemnizatorio
Durante su programa en Radio Mitre, Feinmann adelantó el punto más fuerte del borrador: el Gobierno analiza fijar un tope de 10 sueldos como indemnización máxima para los nuevos contratos. El periodista aclaró que aún está en etapa de discusión: “Un borrador no es lo definitivo. Es para debatir, charlar y eventualmente negociar”.
Además, el esquema incluiría otros cambios importantes:
- Pago de la indemnización en hasta 12 cuotas.
- Exclusión del aguinaldo en el cálculo final.
Cambios en vacaciones, salario dinámico y jornadas
El documento también incorpora ajustes que modificarían la estructura laboral vigente:
- Regreso de los ticket canasta, un beneficio clásico de los años 90.
- Salario dinámico, con premios por productividad otorgados a criterio de cada empresa.
- Paritarias por empresa, rompiendo con la negociación unificada tradicional.
- Jornadas laborales más extensas que las actuales.
- Vacaciones fraccionadas, permitiendo dividir los días de descanso.
Según el análisis, el objetivo es modernizar la normativa y adaptarla a sectores que requieren mayor flexibilidad.
A quiénes afectaría la reforma
En plena discusión, Guillermo Laborda sumó un punto decisivo: todos estos cambios se aplicarían exclusivamente a nuevos trabajadores. Los actuales empleados conservarían sus derechos adquiridos, lo que configuraría un sistema dual.
Qué puede suceder ahora
El Gobierno de Javier Milei planea ajustar el borrador y enviarlo al Congreso en las próximas semanas. Allí se definirá el futuro del tope indemnizatorio, el nuevo esquema de vacaciones, el salario dinámico y el resto de las modificaciones propuestas.
