Sebastián Battaglia y Carlos Izquierdoz se presentaron en conferencia de prensa y comentaron los conflictos que vivió Boca tras la derrota ante Gimnasia en la Bombonera. La secuencia con Juan Román Riquelme y la charla luego de bajarlos del micro fue el centro de la atención.
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El conflicto que encendió la alarma después de la costosa derrota ante el “Lobo” fue la llamativa reunión impulsada por Román. Ante la pregunta de la prensa, Battaglia evitó el cruce y dejó hablar al defensor.
“Nos llamó Román, había unos unos chicos en el micro, otros estábamos en el vestuario, y fuimos a hablar con él nada más. Nos dio sus palabras de apoyo, que nos teníamos que recuperar de lo que había pasado y que teníamos un partido muy importante por jugar, que tenía total confianza en nosotros. Fueron palabras de apoyo y de aliento, nos mostró que estaba con nosotros”, dijo Izquierdoz.
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El DT optó por darle la primera palabra al capitán y luego quiso calmar las aguas. “El Mundo Boca es muy duro, pero nosotros tenemos en claro lo que pasó: fue una charla muy positiva de alguien que conoce mucho el club. Fue algo positivo y no negativo para el grupo”, confesó Battaglia sobre la charla con el vicepresidente.
“Román es una autoridad del club, decidió que en ese momento era importante dar su apoyo y por eso nosotros tuvimos que tener esa reunión dentro del vestuario. En ningún momento fue una charla negativa, dando su parecer del momento que estamos viendo y de saber que tenemos que estar más juntos como nunca como grupo para hacerlo bien el miércoles”, sumó el entrenador sobre la improvisada charla que pidió Riquelme.