Corrían 50 minutos del encuentro correspondiente a la segunda fecha del grupo H entre Uruguay y Portugal por el Mundial de Qatar 2022, cuando un espectador presente en el Estadio Lusail interrumpió el juego con una corrida en el centro del campo mientras portaba una bandera perteneciente al colectivo LGBTIQ+.
Al momento de su ingreso, fue interceptado por los operativos de seguridad y abucheado por los demás aficionados en el imponente estadio. La transmisión televisiva evitó enfocar el momento y quitó el foco que estaba en el centro del campo.
El tenso momento que se vivió en el Estadio Lusail
Ante el pedido del referí, los jugadores tuvieron que permanecer en su posición hasta que la seguridad resuelva la entradera en cuestión. Además de la bandera, el corredor portaba una remera cuyo frente y dorso tenían la frase “Respeten a las mujeres iraníes” y “Salven Ucrania”.
El país anfitrión ya advirtió que este tipo de manifestaciones no serían toleradas, y las penas van desde 3, 5 o 10 años de carcel. En los peores casos, se puede dar inclusive la pena de muerte según lo que dicta la ley islamica.