Boca no le encontró la vuelta al juego en la final de la Copa Argentina ante Talleres. En medio de una noche con mucho roce y discusiones, Juan Ramírez fue expulsado.
El volante que pasó por la “T” recibió rápidamente dos tarjetas amarillas. En tres minutos, Darío Herrera lo amonestó dos veces.
Con jugadas similares, las llegas tarde de Ramírez le costaron muy caro. A los 17 minutos de la segunda mitad, una infracción ante Juan Méndez derivó en la primera sanción de Herrera.
Contra la línea lateral, con una llegada totalmente a destiempo y con su suela levantada, el oriundo de Merlo golpeó a Nahuel Tenaglia y el juez no dudó: segunda amarilla y al vestuario.
Ramírez se retiró llorando del campo, molesto consigo mismo por sus errores que dejaron con 10 futbolistas a Boca.