En la tarde del domingo se dio a conocer que el primer correntino en coronarse campeón argentino de boxeo, Domingo Aldo Gamboa falleció. El deportista era reconocido por haber derrotado en su historia del boxeo a Alfredo Bunetta en el Luna Park.
Parte de la historia del goyano de 84 años recuerda que a lo largo de su vida compitió en 77 peleas de las cuales perdió siete y empató seis, mientras que el resto fueron victorias.
Por su parte, años atrás, el diario Litoral de la provincia tuvo la oportunidad de entrevistar al deportista, donde contó sus principios en la modalidad, cómo fue su vida y de más. “Mis recuerdos son muchos, pero me acuerdo muy bien cuando gané el título, frente a un grande del boxeo como fue sin duda Alfredo Bunetta. Fue una pelea muy dura, y me sentí muy contento por traer un título para Corrientes, sobre todo para Goya, me sentí muy satisfecho porque subí al ring con un objetivo que era traer el título argentino y lo logré frente a una gran figura como Alfredo Bunetta”, resaltó Gamboa en el 2006.
Además, orgulloso de su carrera, agregó: “La definición llegó por nocaut técnico -aclaró en el décimo segundo round- ya que hasta ese momento, la pelea venía pareja, pero pude imponer mi potencia. No me considero un noqueador, yo peleaba y boxeaba, hacía ambas cosas. Si había que boxear, boxeaba bien, pero me gustaba más prenderme en el cambio de golpes, yo creo personalmente que una buena defensa, es un buen ataque. Yo no sabía mucho de técnica, pero también boxeaba, era más peleador y siempre iba al frente”, dijo el boxeador en diálogo con El Litoral.
Sobre sus inicios en el boxeo, Gamboa contó, “un poco fue sin querer, porque un día entré a un gimnasio, estaba mirando y vino el entrenador y me dijo que no podía estar, que salga. Entonces le contesté, bueno entonces me entreno, y así comencé”, destacó.
Finalmente, agregó: “Me empezó a gustar, aparte de muy chico fui muy peleador, en la calle, en cualquier lado me peleaba, pero después fui cambiando, ahora por supuesto veo las cosas de otra manera. Me fue gustando el boxeo y seguí, luego me tocó la Marina y fui a Bahía Blanca, en Puerto Belgrano, allí me buscó un manager, Alfredo Felice que me vio condiciones y consiguió que me dieran permiso para entrenar en Bahía Blanca. Allí hice una campaña larga, pelee por el título bahiense, prácticamente era local y después, cuando salí de baja, me fui a Buenos Aires, hablé con Tito Lectoure y me empecé a entrenar en el Luna Park”.