Dos cachorros, Malevo y Preta, una pareja de aguará guazú del Parque Iberá, tiene colocados trasmisores satelitales con los cuales los especialistas obtienen información sobre esta especie que es una de las protegidas en Argentina.
También se pudo localizar el lugar donde tienen a sus tres crías, cómo los cuidan y cómo lo alimentan. Se trata del cánido más grande de Sudamérica.
A través de los dispositivos se puede tener un mapa de todo el recorrido de los ejemplares, sus nidos, su alimentación. Su forma de vida en un hábitat cuidado. Según los especialistas las imágenes muestran “un comportamiento nunca antes visto”, con lo que es una información de extrema relevancia.
El aguará guazú perdió más del 50% de su área de distribución original en Argentina. Por eso es necesario protegerlo en aquellos lugares donde aún sobrevive, y recuperarlo en los sitios donde desapareció.