Orlando Bertoni, jefe de operaciones de Defensa Civil, informó que hubo alrededor de 6 mil hectáreas consumidas por el fuego, la mayoría corresponden a campos nativos y forestales de la provincia correntina.
Si bien las llamas están controladas en Santo Tomé I y II, La Cruz e Ituzaingó, en Caa Catí siguen activas y las altas temperaturas no ayudan a combatirlas.
Bertoni, en diálogo con Radio Dos, detalló que hay orden de pericias en los lugares con incendios para determinar las responsabilidades, es decir, buscan detectar qué o quiénes originaron el frente: si los propios dueños de los terrenos o algún otro factor.
“El sistema de bomberos necesita descansar, y no le dan tregua, están al pie del cañon combatiendo el fuego. Hay que llamar a la reflexión de la gente a que no prendan fuego o si ven a alguien prendiendo, denunciar. Necesitamos que se apaguen antes que se propaguen”, aseguró el jefe de operaciones de Defensa Civil.
En 28 años de su profesión ha presenciado varias sequías: en 2005, 2006 y 2009, pero nunca una tan agobiante y agresiva como la que la provincia está atravesando.
Según el reporte diario de incendios del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, la provincia correntina recibió ayuda del Estado para combatir este fenómeno: cuentan con 10 brigadistas, una autobomba, una camioneta de ataque inicial, un tractor y dos móviles de apoyo del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF).