La temporada de verano ya se palpita en Córdoba y la provincia se ubica en el podio de los lugares más elegidos por los turistas. Ante esto, empresarios del sector hotelero manifestaron sus altas expectativas de reserva pese al incremento del 100 por ciento promedio de los valores de alojamiento.
Cuatro lugares poco conocidos para disfrutar en Córdoba
Mina Clavero, Villa Carlos Paz, Villa General Belgrano y Mar Chiquita suelen ser los destinos más buscados aunque hay diferentes puntos de la provincia que, si bien no son desconocidos, registran muchas menos visitas y son verdaderos tesoros para visitar.
- Mano Negra, Altas Cumbres: un río frío y transparente con paisajes imperdibles
Río Mano Negra tiene como origen la Reserva Hídrica Pampa de Achala, y sigue su curso por quebradas para unirse con el río Mina Clavero. Es un paraíso serrano de aguas frías y transparentes para nadar en verano.
Se pueden encontrar ríos subterráneos, cascadas, cóndores, formaciones rocosas, quebradas, atardeceres y múltiples miradores para frenarse al costado de la ruta. Muy cerquita está también el Parque Nacional El Condorito, con vistas panorámicas de la quebrada y avistaje de aves. Un paisaje ideal para conectarse con la naturaleza.
- Pueblo Escondido, al pie del Cerro Áspero: una verdadera joya oculta
Pueblo Escondido es un pueblo minero, que fue abandonado a mitad del siglo XX y se encuentra en el límite de Córdoba. En 1995, fue comprado y se decidió restaurar las instalaciones para fomentar el turismo de aventura. Actualmente, es elegido por el paisaje que lo rodea y por la particularidad de su ubicación.
Además de visitar el pueblo, se puede conocer el majestuoso salto de agua de 22 metros de altura que desciende a una enorme hoya, llamado Salto del Tigre. Pasar un día en Pueblo Escondido es un viaje en el tiempo, donde se puede disfrutar de su microclima, ríos, cascadas ocultas, árboles de tabaquillos y una tranquilidad irrepetible.
- El Hueco, Traslasierra: el bosque más grande de Córdoba
El Hueco alberga los árboles más grandes y antiguos. Su vegetación solo crece en altura y su corteza se asemeja a una “piel de cebolla”. Está lleno de “barbas de viejo”, un musgo indicador de que el aire que se respira es muy puro.
Para visitar este bosque, uno debe registrarse en la localidad de Los Molles, Traslasierra. Se debe realizar un trekking de cuatro a seis horas de ascenso de dificultad alta. Cuando se toma altura, se puede adentrar en la reserva natural a través de un camino frondoso con agua de arroyo.
- San Miguel de los Ríos, a ocho kilómetros de Yacanto: naturaleza, agua templada y viñedos
San Miguel de los Ríos cuenta con un camino arbolado de orilla a orilla de la ruta, donde se pueden ver las ruinas que pertenecieron a la Estancia Jesuítica San Ignacio de los Ejércitos. A tan solo algunos pasos, el río Tabaquillo sorprende a los turistas con sus aguas templadas y cristalinas.
Trekking, cabalgatas, pesca deportiva de truchas y ascenso al cerro Champaquí, son solo algunas de las actividades que ofrece San Miguel de los Ríos. Otro de los paseos es la viña Juana Urbana realizado en altura y de producción artesanal familiar. Tiene dos hectáreas con cepas malbec, petit verdot y cabernet franc.
San Miguel de los Ríos se encuentra a 130 kilómetros de la ciudad de Córdoba y se accede por la ruta provincial 5 hasta Santa Rosa de Calamuchita. Luego se toma la ruta provincial 228, que pasa por Yacanto y llega hasta San Miguel.