La ciudad de Córdoba es reconocida por la cantidad y calidad de espectáculos, fiestas y eventos que brinda a lo largo del año. Pero en esta oportunidad, vecinos denuncian por un kiosco que se convierte en boliche “de lunes a lunes”.
“No tenemos más tranquilidad hace tres años”, dijo un ciudadano radicado en barrio Poeta Lugones hace 50, en diálogo con ElDoce. En su fachada, el local exhibe que es un comercio de distintos productos, pero los aledaños al sector afirman, “un burdel al fondo de la despensa”.
“Gente de todas las edades se juntan acá y toman”, detallaron las víctimas del volumen que persiste hasta altas horas de la madrugada. En tanto, indicaron que toda “la movida” está a cargo de un joven.
Otra mujer que vive en la zona norte de la ciudad recordó un ejemplo: “Había una chica borracha y tirada sobre el capot de un auto y no dejaba salir a nadie”.
El reclamo para las autoridades
“Nos quejamos ante las autoridades y vinieron, pero todo sigue igual”, narró con bronca una señora mayor de edad. Al mismo tiempo, aseveró que ya hablaron con el director del CPC cercano y la Policía.
“Los que vienen a la fiesta nos responden mal, insultan y se creen los dueños del lugar”, sentenciaron con bronca las víctimas. Ante esta situación, concluyeron: “Pienso que acá fallan las autoridades. Hay otro en la otra cuadra”.