A raíz de las abundantes lluvias y la apertura de válvulas en el lago San Roque, las autoridades provinciales anunciaron que se espera una importante creciente en el Río Suquía. Según precisaron, “se espera el pico más importante de crecientes, con intenso caudal de agua” alrededor de las 21.
Las intensas precipitaciones provocaron que algunas viviendas se inundaran y diferentes calles de la ciudad sufran anegamientos, pero a lo largo del día -y con ayuda del clima- la situación se ha podido contrarrestar. No así en la zona de La Calera, donde 30 personas se autoevacuaron en barrios como Diquecito, Chipi, Las Flores y Matadero, ante el avance del agua.
“Toda la cuenca que alimenta a Córdoba capital, por La Calera, va a crecer. Se va a incrementar mucho el caudal del rio Suquía. Hay que tener cuidado. Ambas costaneras van a estar con mucha agua, por lo que fue interrumpida la circulación vehicular”, alertó Diego Concha, director de Defensa Civil de Córdoba.
Bomberos voluntarios, Defensa Civil y la Policía de Córdoba trabajan en una Mesa Coordinadora para contener las consecuencias del fenómeno.
Hubo registros de más de 100 milímetros en algunos sectores, calles anegadas y daños en diferentes lugares, tanto de la Capital como en el interior.
Asimismo, alertaron por el importante caudal que registran los cursos de agua y solicitaron “a la población que evite permanecer en las inmediaciones” y “respetar las indicaciones de las autoridades y fuerzas de seguridad para prevenir riesgos”.