Más allá de jugar desde niño en Belgrano, a Mariano Troilo se le vino todo encima muy rápido. Promocionado desde la Reserva, donde era figura, se insertó rápido en el plantel superior pero una seguidilla de errores lo postergaron. Volvió a ser titular y se va afianzando en una línea de fondo que intenta ganar en solidez.
El marcador central sabe por lo que pasó, y el esfuerzo que hizo para salir adelante. "Este año cambié de mentalidad, me propuse disfrutar estar en la Primera con Belgrano. Me costó mucho llegar y no lo estaba pasando bien. Entraba a redes y veía lo que se decía. Ahora trato de disfrutar más del fútbol, que mi familia y mi novia me vean bien“, reveló en una entrevista con Tercer Tiempo, por Radio Sucesos.

“Mi viejo me ayuda mucho, jugaba en la Liga Cordobesa (en Argentino Peñarol), me aconseja todo el tiempo. Es como un analista de video más que tengo para mí. Tres o cuatro días antes de cada partido me dice como juega el ”9″ y los extremos", destacó.
“Entiendo el fastidio, el enojo de la gente, porque el hincha viene a buscar alegría y a veces no se la podemos dar. Tratamos de dar lo mejor que podemos, pero a veces el resultado no es el esperado. Estoy desde los siete años en Belgrano, viví de todo en el club“, resaltó.
Y admitió: “Estamos cometiendo errores en defensa que pagamos caro. Tenemos que apuntar a mejorar y hacerlo lo más rápido posible porque ningún equipo te perdona. Contra Boca hicimos un buen partido y se nos fue de las manos al final".
Pero a al vez destacó: “Encontramos orden con la llegada del Ruso (Zielinski). Nos pide tranquilidad, jugar sin desesperarse, porque con orden se pueden hacer grandes cosas".
LAS CHANCES DE BELGRANO
Belgrano se ubica a cinco puntos del último de los que clasifica a octavos de final de la Copa de la Liga (Defensa y Justicia), con nueve por disputar. Este lunes visitan a Tibre, obligados a sumar para no quedar fuera de carrera. De cualquier modo, Mariano Troilo confía en el equipo.

“Mientras haya chances, la ilusión está. Depende de nosotros en estas fechas que quedan, serán finales y queremos dejar a Belgrano lo más alto posible. La ilusión de clasificar sigue”, subrayó.
EL DUELO APARTE CON NAHUEL BUSTOS
Más allá de la posición que los pone frente a frente, Mariano Troilo y Nahuel Bustos, sostuvieron un duelo especial en el último Belgrano-Talleres.
“Lo conozco desde chico, porque fue compañero de mi papá en Peñarol. En los entrenamientos me quedaba jugando con él. Sabíamos lo que era capaz de hacer en un tiro libre, y más allá de que adelantó la pelota y el árbitro por eso no convalidó el gol, la verdad es que nos habíamos desentendido de la jugada", expresó.