La inseguridad es total en Córdoba, donde los delincuentes parecen haberse convertido en los dueños de todo sin ningún control, arrasando como lo hicieron con los bienes y la tranquilidad de una empresa que cerró para siempre tras haber sido desvalijada en 11 ocasiones, sin que nadie sea detenido.
Es el drama de una Pyme familiar del Parque Industrial Mi Granja, que sufrió dos asaltos en menos de un mes, que se sumaron a los nueve que habían sufrido hasta marzo, por lo que decidieron bajar las persianas para siempre: “Nos destruyeron todo”, dicen Juliana García e Ignacio Aubinel.
“Todos los meses volvemos a empezar de cero y es indignante. La situación es terrible, ya nos cansamos”, se resignaron en diálogo con El Doce los propietarios de Additech, una fábrica de aditivos para la nutrición y sanidad animal.
Los robos los pusieron en jaque y fueron minando sus ganas de seguir: “En Semana Santa nos arrancaron las luces y se llevaron mesas. Este martes llegamos y había sido peor: arrancaron el pilar de luz, el cielorraso, luminarias, otras mesas y cuatro máquinas”, relató Juliana.
Finalmente, aseguran que se van para siempre: “Todo tiene un límite. Todavía estamos en shock, nos vamos por los robos. Este es un sueño familiar que no termina acá, nos vamos a volver a levantar”, concluyó.