Rodrigo Rivoira, hijo del recordado Chulo, visitó Alta Córdoba y se emocionó con el mural que los hinchas de Instituto le dedicaron al entrenador, fallecido en agosto de 2019 víctima de una enfermedad y a los 59 años.
El Chulo se ganó el corazón Albirrojo con el ascenso a Primera División en la final de 2004 ante Almagro en el viejo Estadio Córdoba. Hasta aquí, la última vez en que la Gloria subió al círculo máximo. Y dirigió en distintos ciclos al equipo.
En el Centenario del club en 2018 no pudo asistir a causa de lo avanzado del cáncer que lo afectaba. Los hinchas lo recuerdan con gratitud y por eso le dedicaron un mural en el estadio Monumental.
Instituto recibirá en este escenario mañana lunes a las 19 a Quilmes, en partido decisivo para la clasificación a la siguiente fase de la Primera Nacional. En el intento de un ascenso que consiguió hace casi 17 años con el Chulo.