Un hombre de 42 años debió ser salvado de las compuertas del balneario de Villa María luego de que se arrojara a las aguas turbulentas. Del rescate participaron guardacostas y bomberos, que ayudaron al hombre -en aparente situación de calle- a salir a flote.
El episodio tuvo lugar poco antes de las 17.00 horas, cuando el hombre se arrojó a una zona de mucha turbulencia y, como consecuencia, sufrió escoriaciones y también una convulsión. La intervención de parte del equipo de guardacostas municipales, en primer lugar, y de bomberos, inmediatamente después, permitió salvar la vida de esta persona.
El guardacostas Ángel Díaz fue quien se zambulló rápidamente al rescate, cuando fue alertado de lo que estaba ocurriendo. Luego de varios minutos de intentar nadar en las aguas turbulentas, pudo rescatarlo. Para ello contó con la ayuda del guardacostas Benjamín Yatchesen, quien llegó al lugar provistos de cabos y salvavidas.
Fue así que lograron acercar a la orilla a la persona, y poner su vida fuera de peligro. A poco de ser sacado del agua el sujeto sufrió una convulsión. Desde bomberos informaron más tarde que la personas rescatada se encontraba fuera de peligro, sin heridas ni traumatismos, y siendo evaluado por el servicio de Salud Mental.
En el lugar está prohibidó arrojarse al agua ya que toda la fuerza y caudal del río se concentra en ese lugar, generando un fuerte arrastre y una profundidad superior a los 4 metros, según ampliaron desde el municipio.