Tomás Adad es un joven que dejó su Orán natal, en Salta, y vino a la provincia en busca de mejores oportunidades. Y vaya que lo consiguió. En cinco años, pasó de cocinar y probar en su departamento a cocinar la mejor empanada criolla de Córdoba. Gustito a Salta, su local de comida, ganó el premio en la Semana de las Ollas y las Empanadas 2025.
El cocinero que compitió por primera vez en la competencia regional le abrió las puertas de su cocina a Vía Córdoba. Allí, con sencillez y mate de por medio, recordó sus primeros pasos en la Capital, reflexionó sobre la competencia y contó algunas claves de sus preparaciones.

De estudiar ingeniería química a apostar a la cocina en Córdoba
El joven de 28 años vino a la Capital para estudiar ingeniería química en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC). Pero en tercer año de la carrera se dio cuenta de que no se veía “haciendo eso toda la vida”, dijo.
El salteño escuchó su corazón, dio un giro de 180 grados y se metió de lleno en su pasión: la cocina. “Mi madre me decía que era muy sacrificada y poco reconocida, pero yo le tenía fe en Córdoba”, expresó sobre aquel primer paso.

Pero la gastronomía no es un elemento caído desde el cielo sin explicación, sino una herencia de su padre, Juan Carlos “Pimpo”, quien le brindó dos recetas clásicas de empanadas. Junto a Matías, uno de sus 10 hermanos, decidieron poner manos a la masa, experimentar y probar.
Las primeras empanadas en un departamento de Córdoba
En 2020 empezó a preparar empanadas en su departamento y sólo para sus amigos y amigas. Sus allegados lo felicitaron por las preparaciones que eran para chuparse los dedos y el boca en boca se hizo digital a través de los grupos de Whatsapp.
El crecimiento fue tal que preparaba entre 25 y 30 docenas de empanadas por día en su pequeño apartamento del barrio Nueva Córdoba. La realidad y la idea de otros dos hermanos lo obligaron a buscar un local que sea su centro de producción.
La apertura de Gustito a Salta en Córdoba
Así, en 2023, Gustito a Salta abrió sus puertas en la calle Laprida al 212, barrio Güemes. Uno entra y se encuentra con folklore en un volumen agradable, parte de la hermandad Adad y un equipo armonioso y sencillo conformado por 12 personas.

Mientras uno hace su pedido, puede ver a través de un ventanal la producción 100 por ciento casera y fresca. “Todo lo hacemos el mismo día a la mañana y buscamos que sean ingredientes de calidad”, aseguró Tomás, quien trae condimentso como comino y pimentón desde Cachi.
El cocinero perfeccionó las recetas de “Pimpo” y pensó en otras para ahora contar con cinco variedades de empanadas: carne cortada a cuchillo, pollo, jamón y queso, queso de cabra, y espinaca y queso azul. Todas salen con la salsa picante llajua.
La masa que envuelve los suculentos rellenos también es casera, y tiene un característico color anaranjado, que es parte del logo de Gustito a Salta. “Mi hermana le puso ese nombre porque queríamos que cada bocado le de gusto a la gente y pueda viajar a través de los sabores”, reflexionó.
El torneo que eligió la mejor empanada criolla de Córdoba
Circuito Gastronómico lo contactó para participar de la Semana de las Ollas y las Empanadas 2025 en Córdoba. La competencia le permitió conocer a grandes cocineros y productores de la Capital y vivir una gran experiencia.

Cuando todo parecía definido y La Vieja Esquina iba a quedarse con el primer lugar, su preparación salió del horno en último turno. “El 50 por ciento ya estaba decidido, pero me dijeron que mi empanada dio vuelta todo y cambió el resultado”, recordó con una sonrisa dibujada en el rostro.
Finalmente, Gustito a Salta se quedó con el título de la mejor empanada criolla al horno de Córdoba este año. “Me imaginaba en la cocina, pero nunca haciendo empanadas. Se ve que salió bien, je”, concluyó el salteño que llegó a Córdoba en 2016 y sueña con tener un restaurante que ofrezca platos típicos de la gastronomía Argentina.