Manuel Velasco es un cordobés que, al igual que muchos argentinos y argentinas, viajó al exterior para probar suerte con un emprendimiento. Luego de pasar un tiempo en Chile, se instaló en Australia donde creó un servicio, a partir de desechos, que le permite ganar 130 mil dólares al año.
Un cordobés gana 130 mil dólares al año en Australia
Manuel es un hincha de Talleres, de 55 años, que vende aceite a restaurantes, clubes y entidades a lo largo de Australia. Pero, al mismo tiempo, recolecta el líquido usado para fabricar nafta para aviones, o jet fuel, como también se lo conoce.
En diálogo con Vía Córdoba, Manuel describió que siempre tuvo una “vida nómada”. Nació en Laboulaye, se mudó a Córdoba Capital, luego a Ushuaia, regresó a la capital de la provincia para saltar a Santiago de Chile y terminar en Sidney.
Los inicios nómadas de Manuel Velasco y su paso por Chile
El cordobés estudió ingeniería mecánica aeronáutica, pero se cambió a ingeniería en sistemas. Sin embargo, dejó la carrera en segundo año para trabajar en una fábrica de pastas en Chile.
La bitácora de viajes de Manuel comenzó en 1990 cuando emigró al país detrás de la Cordillera de Los Andes. En la región vecina, estuvo a cargo de la instalación y funcionamiento de la productora Dinote.
En paralelo, se puso de novio con una joven de padres chilenos, pero que vivía en Australia. Dos años más tarde, optaron por casarse y a mitad de 1993, emigraron a Oceanía.
Manuel Velasco, su llegada a Australia y el inicio del emprendimiento
Durante 15 años, trabajó en otra productora del alimento italiano en Shellharbour, sur de Sidney. “Estaba a cargo de todo en la fábrica y como era muy grande tenía buenos precios. Compraba productos para la fábrica y para mí”, describió.
En ese contexto, el cordobés inició una pequeña distribuidora que contaba con muchos elementos que no necesitaban refrigeración. Harina, pan rallado, aceite, entre otros productos. Pero, luego de mucho tiempo en el negocio y un conflicto con los dueños, abandonó su puesto.
Aceite, la clave del negocio del cordobés Manuel Velasco
Antes de su salida, el cordobés hizo una cartera de contactos con el paso de los años y evidenció una necesidad en el mercado. “¿Qué pasa con todo el aceite que se usa en Australia?”, se preguntó. Es que, la gastronomía de aquel país se caracteriza por las frituras como el pescado, pollo, milanesas y papas.
Con esta premisa, Manuel comenzó a fortalecer esa actividad y creó un servicio al cliente para recolectar el aceite usado de las cocinas. Paralelamente, se contactó con empresas que convertían el insumo en combustible.
De esta manera, armó una ruta de aproximadamente 200 kilómetros. En ella, había restaurantes, clubes e instituciones con freidoras en sus cocinas. Actualmente, Manuel tiene una cartera de 60 clientes a los que les vende aceite.
Se dedica a la recolección, venta y distribución de aceite desde hace 15 años. En ese entonces, no estaba popularizado el servicio de entrega de aceite usado, y restaurantes arrojaban la grasa al inodoro, al resumidero de la cocina y demás vertederos.
Lo que empezó con 500 litros de aceite por semana, hoy se convirtió en una recolección de 10 mil litros, según contó. Cabe destacar que, antes de la pandemia llegó a reunir hasta 15 mil litros por semana.
A cuánto se compra y se vende el aceite en Australia
Respecto al producto que vende, describió que proviene de Malasia “gracias a un importador que lo trae al puerto y almacena”. El producto llega en cajas, dentro de una bolsa de 20 litros, que luego vende entre 55 a 57 dólares australianos.
Paralelamente, Manuel compra el litro de aceite usado a 30 centavos de dólar australiano y lo vende a 75 centavos. Según sus cálculos, gana aproximadamente 200 mil dólares australianos al año. Es decir, 131.944 dólares americanos.
Cómo es la vida en Australia y lo que más se extraña de Córdoba
Ante este escenario, Manuel hizo un paralelismo con la provincia de Córdoba, a la que vuelve al menos una vez al año. “Acá se vive bien, tranquilo. Voy a Córdoba y me dicen que no hable por teléfono en la calle y veo que viven enrejados”, cotejó sobre la inseguridad.
En el plano económico, aseguró que Australia carece de “altos y bajos” y eso “permite proyectar como familia a cinco años”. No obstante, aclaró una falsa creencia para aquellos que deseen emigrar. “La gente viene con la idea de que va a hacer plata, pero no es así. Ganas más, pero gastas más. El costo de vida en Australia es muy alto”, aclaró.
Respecto a los valores de los servicios principales, Velasco ejemplificó: “Una casa pequeña ronda entre 700 u 800 mil dólares australianos. Cenar en un restaurante barato, cuesta entre 25 a 30 dólares el plato”.
Pero más allá de la estabilidad económica, el hincha de Talleres extraña “la cultura de la amistad de Argentina”. “Acá es el trabajo, la familia y pocos amigos. Básicamente, estas en tu casa a las 20 horas”, describió.
En este sentido, confesó que el fútbol lo identificó y lo unió más a Argentina. Manuel Velasco, un cordobés que viajó a Australia por amor y encontró un mercado por explotar.