Un violento femicidio conmocionó el pasado viernes por la mañana a la ciudad de Córdoba. En barrio Santa Isabel, un remisero siguió y mató a su expareja frente a la Plaza Los Algarrobos luego de que ella dejara a sus hijos en la escuela. Tras el crimen, el hombre se disparó en la sien y, este domingo, falleció en el Hospital Príncipe de Asturias.
El día del ataque, Paola Monzoni (42) había dejado a los menores de 14 y 10, en un colegio cercano y se movilizaba en taxi. Según trascendidos, el agresor la siguió en un Peugeot 307 de color gris, interceptó el vehículo y efectuó cuatro disparos.
Una de las balas impactó en la cabeza de la mujer y provocó el deceso inmediato. Ante la situación, el femicida, identificado como Jorge Eduardo Brondo (65), se autoinfligió un disparo en la sien y quedó tendido en el suelo.
Los vecinos escucharon los estallidos y dieron aviso a la Policía. Una unidad móvil llegó a la escena del crimen e inmediatamente trasladó al autor de los disparos al hospital Príncipe de Asturias.
El relato de los vecinos en barrio Santa Isabel
“No escuchamos ninguna discusión previa”, dijo una vecina de la zona a Radio Mitre al ser consultada por un aparente conflicto anterior. En paralelo, aseguró que “se sintieron cuatro disparos”.
El agresor llegó con vida al hospital
El director del nosocomio Príncipe de Asturia, Mario Lerda, detalló que el agresor llegó con vida y fue puesto en terapia intensiva. “Está con asistencia respiratoria y en estado crítico”, dijo el profesional en su momento. Aclaró que la bala seguía alojada en la cabeza.
“De acuerdo a los estudios, veremos si sigue internado o es trasladado a un centro de tercer nivel”, agregó Lerda. Al ser consultado por la presencia de otras heridas, precisó: “Hay lesiones de punzo cortantes cerca de las costillas derechas superiores, pero desconocemos el origen de las mismas”.
Finalmente, Brondo fue trasladado al Hospital de Urgencias para intervenirlo quirúrgicamente. Sin embargo, decidieron no realizarle la operación por su estado de salud. Este domingo, 48 horas después del crimen, falleció en ese nosocomio.
