Un taxista sufrió un violento robo mientras trabajaba en barrio Jorge Newbery. Dos delincuentes se hicieron pasar por pasajeros e intentaron ahorcarlo. El hombre sufrió fracturas en la nariz y fue trasladado a un hospital de la ciudad de Córdoba.
Sucedió el pasado viernes por la tarde. Un taxista de 52 años, de la empresa Transmitaxi, se encontraba trabajando en la zona del Sanatorio Mayo cuando dos “pasajeros” lo frenaron y le dijeron que se dirigían al barrio Jorge Newbery.
Durante el viaje, los sospechosos cambiaron el destino y el chofer comenzó a dudar de la zona a la que lo llevaban. Minutos después, apareció un móvil policial y el taxista le hizo señas de luces para que lo controlaran, pero los efectivos no se dieron cuenta de lo que ocurría y lo dejaron seguir.
EL RELATO DEL TAXISTA
En diálogo con Radio Mitre, el hombre contó cómo fue el violento episodio. “Vi el lugar medio desolado. Veo un patrullero del barrio y le hago señas de luces. Cuando pasa por el lado mío, lo miro y le cierro el ojo como para que me controle, que haga algo. No sabía cómo hacer para que se parara”.
“Lo veo por el espejo y se vuelven. En eso, un hombre en una Kangoo entraba al barrio, que es una villa, y se bajan los policías. Yo paro y los tipos (delincuentes) me dicen: ‘No es acá, venimos de laburar’”, dijo.
Los uniformados controlaron al otro auto pero no quisieron revisar al taxista: ‘¿Me vas a controlar?’. ‘No’, me dice. ‘Seguí’. Cuando doblé empecé a ver casitas precarias, y de repente uno de los ladrones cruzó un cinto y me empezó a ahorcar, no aflojaba, ya me estaba desvaneciendo”, contó.
El hombre pudo soltarse, se bajó del auto corriendo y a los metros encontró un galpón en el que pidió ayuda. “No sé qué le pasó por la cabeza a la policía”, dijo la víctima, tras reprochar el accionar de los efectivos.
Finalmente, el taxista sufrió fracturas en la nariz y posteriormente fue trasladado al Hospital Elpidio Torres.
