"El lunes en Salsipuedes tiene que estar cerrado el plantel, al menos el 90 por ciento". Textual de Diego Osella, a quien le cambió la cara en los últimos días porque van llegando los refuerzos que pidió para el durísimo semestre que se avecina en Belgrano, con el objetivo de seguir en Primera.
Marcelo Herrera, zaguero ex Lanús y dirigido por Osella en Olimpo, fue el primero en sumarse. El delantero Mauricio Cuero también ya fue anunciado en forma oficial. Y es otro de conocidos por el DT en su paso por Bahía Blanca.
Y el viernes a última hora se formalizó el préstamo por seis meses de Marcelo Meli, la debilidad del entrenador, por aquella grata aparición en Colón de Santa Fe.
Está muy encaminado lo de Leandro Díaz (Atlético Tucumán), el delantero que quiere Osella. Y lo propio ocurre con Juan Patiño, el zaguero paraguayo que también se puede desempeñar como lateral derecho.
En el costado izquierdo, la expectativa es que llegue el uruguayo Cristian Almeida, de Defensa y Justicia, por gestiones del representante Cristian Bragarnick.
Y Osella se quedó con las ganas de traer a Gabriel Gudiño (arregló en Colón con un préstamo de 150 mil dólares), por lo que insistirá por otro volante por derecha. Le gusta Rodrigo Droopy Gómez.
Otra buena noticia para el entrenador Celeste es que se reeincorporó al trabajo Maxi Lugo, quien había demorado su llegada por tramitar en Rubio Nú de Paraguay la extensión de su contrato.
Y entrena con el plantel el delantero venezolano Anthony Uribe, el Matatán, una incorporación que es más una apuesta que un refuerzo.
