La Provincia indicó que se lleva a cabo la construcción de dos sistemas de desagüe bajo la nueva calzada que cerrará la avenida Circunvalación de Córdoba.
Se trata de una obra que se desarrolla a través de conductos subterráneos, que fueron diseñados para contener y drenar los caudales originados por el efecto de lluvias extraordinarias, evitando así inundaciones en la ciudad capital.
Las últimas precipitaciones que afectaron a Córdoba pusieron a prueba el correcto funcionamiento de estos aliviadores de agua, aseveraron.
El desagüe que presenta un grado mayor de avance (cercano al 90%) es el tramo distribuidor Spilimbergo – río Suquía. Esta canalización posibilita el escurrimiento de las cuencas de Av. Spilimbergo, Av. Rafael Núñez y las Sierras Chicas.
Está compuesto por cuatro conductos cerrados de hormigón armado, de tres metros de ancho por dos metros de alto. Tiene una longitud total de 1,9 kilómetros y permite desaguar un caudal de 132 metros cúbicos por segundo.
La información fue comunicada en la misma jornada en la que vecinos del suroeste, en especial de barrio Sacchi, se mostraron enfadados por inundaciones y calles anegadas por las obras de Circunvalación.