Mientras no se detiene el número de muertes en las rutas cordobesas por los choques, parece ser que no aprendemos más a la hora de exponernos al peligro cada vez que tomamos un volante para trasladarnos en un automóvil.
Pese a todo lo que se dice respecto de los riesgos que conlleva manejar con dosis de alcohol en sangre, por más mínimo que sea el consumo, los controles llevados a cabo por la Policía Caminera, demuestran que aprendemos muy poco respecto de las tragedias viales que se suceden a diario.
Según el reporte de esa sección de la Policía, durante el fin de semana, entre viernes, sábado y domingo, 135 conductores fueron multados con alcoholemia positiva en las rutas de Córdoba.
La cifra representa unos 45 por día, o casi dos por hora.
El número es preocupante por el peligro que genera cada automovilista en ese estado y las consecuencias que puede traer para sí y para los terceros que circulan por las distintas vías de comunicación de la provincia.