La segunda intención de siembra de maíz para la campaña 2017/18 prevé una superficie de casi 2,4 millones de hectáreas, 6 por ciento más que en el ciclo anterior; y la de soja, de casi 4,2 millones, 3 por ciento menor, de acuerdo a las proyecciones realizadas por el Departamento de Información Agroeconómica (DIA) de la Bolsa de Cereales de Córdoba.
A fines de noviembre, la siembra de maíz alcanza a 790.000 hectáreas, con un avance de 33%, mientras que la de soja mantiene a los productores a la espera de precipitaciones para avanzar con la labor.
Proyecciones económicas favorables en maíz durante la presiembra explican el aumento en el interés del cereal en detrimento a la soja.
"Con un avance de cosecha a nivel provincial del cereal inferior al 5%, los rendimientos relevados arrojan valores muy dispares en la provincia", consigna el informe.
En el norte de Córdoba se estiman rindes promedios entre 15 a 22 quintales por hectárea, mientras que en el centro - sur estarían entre 25 a 35 qq/ha y hacía el sudeste (DepartamentosUnión y Marcos Juárez) superarían los 40 qq/ha.
Los departamentos del este provincial (Marcos Juárez Y Unión) han sembrado casi el 80% del área maicera departamental.
En tanto, al norte de Córdoba (Departamento Río Seco) el avance es nulo, esperando precipitaciones para iniciar con la labor.
Respecto al estado fenológico, el 55% del maíz temprano se encuentran entre 2 a 4 hojas y el 45% restante entre 5 a 8 hojas.
En lo que respecta a soja, el grueso de la siembra se estaría concretando durante ésta segunda quincena de noviembre, excepto en la zona norte de la provincia, donde más de 80% del área corresponde a fecha de siembra tardías (diciembre en adelante), según las estimaciones de la entidad bursátil.
En cuanto al trigo, se tiende a confirmar una cosecha de 3.872.000 toneladas -24% menos que en la campaña pasada-, pero la segunda más alta en los últimos 10 años y, con un avance de cosecha en Córdoba cercano a 5%, 79% del área triguera se encuentra fenológicamente en "madurez".
Mientras que en el sorgo se experimentaría una caída de casi 90.000 toneladas, pues se alcanzarían apenas las 48.000 toneladas este año.