Por Marcelo Chaijale
A paso firme y seguro va marchando Instituto en la Liga Nacional desde su regreso. La Gloria sale a jugar la tercera campaña seguida en la elite, tras ser uno de los fundadores de la Liga, disputar el torneo de Transición en 1984 y las dos primeras temporadas, en 1985 y 1986.
Desde las 21.30 de este miércoles visita a Estudiantes de Concordia en el debut de la Liga Nacional.
El club de Alta Córdoba crece año a año desde su vuelta, en la 2015/16, y arranca la Liga con el impulso que le dio el Súper 20, donde fue uno de los mejores de la competencia en cancha, sumando 12 victorias en fila, se quedó con el subcampeonato (perdió la final con San Martín de Corrientes, y se dio el gusto de frenar la marcha de San Lorenzo, invicto desde las finales de la Liga pasada.
Además se quedó con el gran premio, el pasaje a la próxima Liga Sudamericana. En 2018, año de su Centenario, encontrará a los Albirrojos jugando a nivel internacional.
Con sólo tres jugadores que siguen del plantel anterior, Gastón Whelan, Miguel Gerlero y Sam Clancy, el nuevo entrenador, Facundo Müller apostó por jugadores casi todos de la misma generación, y armó un grupo que se consolidó muy rápido y tiene claro a que juega.
Instituto apostó fuerte por Dwayne Davis, un jugador reconocido en Europa y respondió con acierto, siendo uno de los goleadores del Súper 20, aunque sin absorber juego.
Además, cuenta con dos nacionales de primer nivel, como el base Santiago Scala (campeón de la Liga pasada con el Ciclón) y el ala-pivote Facundo Piñero.
De todas maneras, el elenco de Müller muestra como virtud no sobrecargar la ofensiva en un solo jugador, ni siquiera en Davis, sino que muestra variantes, como las que traen del banco Chuzito González y el luchador Cristian Amicucci.
Su primer rival es Estudiantes de Concordia, perdió a sus dos mejores jugadores, Dar Tucker y Javier Justiz, pero el debutante entrenador Lucas Victoriano logró recambios interesantes y llevó al equipo a la final de la Liga Sudamericana.
