La inseguridad en Córdoba es cosa de todos los días. Cada vez es más frecuente que se conozcan casos de arrebatos en la vía pública de celulares, carteras y cualquier otro objeto personal.
Entre los objetivos más preciados por los ladrones están, desde hace un tiempo, las motos. Pero ahora, según los trabajadores que usan ese medio todos los días, se ha agravado.
Los repartidores de la ciudad, agrupados en el Sindicato de Motocicletas, Mensajeros y Cadetes de Córdoba (Simmcapcor), denuncian que los robos de motos han crecido exponencialmente en los últimos meses. Según Walter Sánchez, referente de la comisión directiva del gremio, "sólo el miércoles pasado hubo tres robos a tres compañeros". La modalidad no para de crecer: "En dos meses, por lo menos nos llevaron 20 motos", agregó.
La modalidad que utilizan es simple: llaman, hacen un pedido y cuando los delivery lo van a entregar, se llevan la moto. La solicitud se hace desde una dirección falsa, así que no hay a quién reclamar y denunciar. "Bella Vista es uno de los barrios donde tenemos más problemas", dijo Sánchez a Día a Día.
Están cansados
En un comunicado publicado ayer en Facebook, los "deliverys" dicen que están cansados de los "constantes atracos" de los que son víctimas y exigen una solución al Gobierno. "Estamos esperando que las autoridades tomen medidas que frenen la ola de inseguridad y garanticen el tranquilo desempeño de nuestras actividades", expresaron anticipando una marcha organizada por la entidad el próximo miércoles 20 de septiembre, desde las 17. Se agruparán en avenida General Paz y La Tablada, y desde allí marcharán en caravana hacia la Jefatura de la Policía, en Colón y Santa Fe. "Buscamos, como primera medida, el diálogo. La moto es nuestra herramienta laboral, sin ella nos quedamos sin trabajo y sin ingresos para nuestra familias", dijeron.
En marcha
La última movilización organizada por los "deliverys" locales fue en marzo, cuando marcharon contra el decreto del Gobierno nacional de obligarlos a utilizar cascos con la patente impresa, chalecos refractarios y la imposibilidad de cargar nafta sin esos requisitos. También contra la Municipalidad y el proyecto de dos concejales de impedir el ingreso de gente en moto en el microcentro cordobés.