El aumento de casos positivos de coronavirus en Córdoba tiene en alerta a las autoridades sanitarias provinciales que también miran con preocupación como crece la ocupación de camas críticas vinculadas a esta enfermedad. Ante esa situación decidieron sumar unas 343 camas en todo el territorio provincial.
El encargado de confirmar esta información fue el ministro de Salud, Diego Cardozo. La decisión se tomó luego de que Córdoba superó el 50 por ciento de ocupación de camas críticas. La novedad surge en el día con más casos confirmados en Córdoba: 1.145, 611 en Capital y 534 en el interior.
En la Capital se dispondrá de 50 nuevas camas que surgen de la transformación del ala pediátrica del Hospital Misericordia, que aportará 46 unidades: 10 de terapia intensiva con respirador, 16 de cuidados intermedios y 20 comunes con oxígeno. Además, se sumarán otras cuatro camas de terapia intensiva en el Tránsito Cáceres de Allende.
En el interior se agregarán 100 camas en la colonia Santa María, de Punilla, al liberarse cuatro pabellones de pacientes de salud mental que fueron derivados a otras instituciones. También se sumarán unidades de terapia intensiva, de cuidados intermedios y salas comunes con oxígeno en Río Cuarto, Villa María, Laboulaye, Unquillo, Villa del Rosario, Corral de Bustos y el hospital Domingo Funes, de Punilla.
En Río Tercero, donde la salud privada ya no tiene más contención, se abrieron cuatro camas de terapia intensiva con respirador y 20 de cuidados intermedios. "De este modo se va a poder dar respuesta a una población de más de 50 mil habitantes", valoró Cardozo.
A su vez, se convocó al sector privado a acordar una reprogramación escalonada de cirugías programadas. "Exceptuando las oncológicas y las cirugías que pueden tener una consecuencia importante en la salud del paciente. De lo que hablamos, por dar un ejemplo, es de una hernia: una intervención que ocupa una cama y se puede reprogramar", explicó el ministro de Salud.
Por el momento, no se decidieron otras medidas más que fortalecer el sistema de salud. Sin embargo, Cardozo admitió que "se evalúa todos los días y está siempre en análisis" tomar alguna medida que pueda bajar la circulación de personas, tratando de no afectar la dinámica productiva y laboral.