Los controles se hacen todos los fines de semana con el fin de evitar el alcohol a la hora de manejar, y se realizan con un móvil estacionado y con otro móvil tipo satélite. Donde se le pide al conductor que estacione, se le brinda la pipeta y con una máquina mide el nivel de alcohol en sangre, el permitido es 0.50.
Este fin de semana fueron ochos los conductores que le secuestraron el vehículo por exceder el mínimo de alcohol en sangre. Y uno solo por falta del seguro para poder circular.