Este lunes por la tarde, la empleada doméstica que usualmente trabaja en la vivienda de Chubut y Estados Unidos encontró a la mujer, una abuela de apróximadamente 90 años, muerta sobre la cama, y a su hijo -un hombre de unos 50 a 60 años- atado en una silla, quien estaría así desde el sábado. La casa, revuelta, mostraba evidentes signos de robo.
"Es un hecho complicado para sacar conclusiones iniciales. Lo que objetivamente podemos decir es que tenemos una persona que fue encontrada atada en el domicilio con signos de haber permanecido en esa situación un par de días, el fin de semana al menos, quien fue trasladado al Hospital Regional", dijo el fiscal Juan Carlos Caperochipi.