Las negociaciones entre el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (SOEM) y la Municipalidad capitalina, parecía que se iban a extender, pero eso no ocurrió y finalmente, el martes terminaron sellando el acuerdo.
De acuerdo a lo firmado por Walter Arévalo, secretario general del gremio, y Raúl Jalil, intendente de la capital, ningún empleado municipal estará cobrando menos de $26.000 pesos, después de julio. Además, entre las ocho cláusulas que existen, se destaca que la comuna dará un aumento salarial de carácter no remunerativo por $5.500 a las categorías de la 1 a la 11.
"Las partes acuerdan el tratamiento inmediato de reapertura de discusión salarial si las circunstacias socioeconómicas siguen haciendo perder el poder adquisitivo de los trabajadores", comentó Arévalo, informando que hay una cláusula de revisión salarial.
Por último, Arévalo contó que los trabajadores percibirán un extra de $2000 pesos que tiene que ver con una ayuda a la canasta escolar. Esto se efectivizarán con el cobro de haberes pertenecientes al mes de febrero, indicó en diálogo con El Esquiú.