Con relación a la reciente aprobación del milagro de Fray Mamerto Esquiú, el obispo de Catamarca, monseñor Luis Urbanc dijo que "seguimos con nuestra esperanza viva de tener un nuevo beato en nuestra Iglesia argentina, quien era un enamorado de la Madre Morena".
Explicó que "el milagro obrado por Dios, se trata de la curación de una niña, oriunda de la provincia de Tucumán". Por su parte el arzobispo de Tucumán, monseñor Juan Carlos Sánchez, expresó que "es una gran alegría para nuestra Patria argentina y especialmente para los norteños, tener a un catamarqueño en camino hacia la beatificación".
En la biografia oficial se indica que Fray Mamerto Esquiú, fue un “prelado franciscano argentino (1826–1883). Desde muy joven descolló por su talento, humildad y patriotismo. Pronunció una famosa alocución en la catedral de Catamarca con motivó de la jura de la Constitución Nacional (1853), que motivó que fuese llamado oficialmente el "orador de la Constitución". Más adelante se destaca que “en 1855 fue vicepresidente de la Convención Constituyente de Catamarca, y tres años más tarde obispo de Córdoba”. Entre otras tareas “fundó la revista El Cruzado y otras publicaciones religiosas y en 1956, la Congregación de Ritos del Vaticano inició la gestión de su canonización.