En un procedimiento llevado a cabo en un domicilio de Jesús María, la Policía Ambiental logró recuperar 17 aves silvestres que permanecían de manera ilegal en cautiverio. Los ejemplares fueron trasladados a la Reserva Tatú Carreta, ubicada en Casa Grande, donde permanecerán en cuarentena sanitaria antes de ser reintegrados a su hábitat natural.
Durante el operativo también fueron incautados 19 jaulas y 15 tramperos, instrumentos que presuntamente se utilizaban para capturar las aves de manera ilegal.
Desde la repartición destacaron que los animales silvestres no deben ser mascotas y recordaron la importancia de respetar su vida en libertad. Asimismo, instaron a la población a denunciar cualquier delito contra la fauna silvestre.