“Acá es muy común. Este fin de semana rescatamos a más de 20 personas a pesar que la creciente no fue de magnitud”, cuenta un joven efectivo de Defensa Civil de la comuna de Cabalango. Y agrega, con cierta resignación: “Suena la alarma, pasamos adviertiendo y los turistas muchas veces creen que se las saben todas y no hacen caso. Luego, a esos mismos, que no quieren hacer caso de las recomendaciones, son a los que tenemos que resacatar. En este caso la creciente fue de 30 cm., pero igual la fuerza del agua arrastra a las personas y quedan atrapadas o agarrados de alguna piedra, por lo que debemos sacarlos con sogas”.
Durante el pasado fin de semana, hubo numerosos casos de rescates en lo ríos punillenses. La situación más complicada se vivió en Cosquín, puesto que se produjo una falla en el sensor que activa el aviso sobre la crecida del río, lo que terminó con el dramático rescate de una madre y su hija, que fueron arrastradas por la crecida.
Los polícias del escuadrón enduro de Punilla le salvaron la vida a la mujer, que salió casi sin vida del agua. Además, los bomberos habían rescatado a un grupo de 20 personas que se encontraban en el reconocido balneario Iguana Beach. En ese grupo había personas mayores y niños, pero afortunadamente pudieron sacarlos a todos.
Por otro lado en Villa Carlos Paz, otros 5 turistas fueron rescatados de las aguas del río San Antonio. Este hecho ocurrió, a la altura de balneario el Fantasio, en el sector conocido como El Sapo y tomó intervención el personal del cuerpo de guardavidas. Asimismo, el reporte de las intervenciones realizadas por Cuerpo de Guardavidas de la Municipalidad de Villa Carlos Paz durante en la 1er semana de Febrero de 2022 afirma que, durante este periodo, se contabilizaron dos crecientes, 20 rescates, 6 asistencias y 9 curaciones, unicamente en este ciudad.
Si a las cifras oficiales de la ciudad cabecera de Punilla le sumamos los datos que conocemos extraoficialmente de Cosquín , Cabalango y otras localidades y comunas estamos frente a un centenear de rescates en los ríos punillenses. Los datos alarman, y lamentablemente es una situación que se mantiene cada temporada a pesar de los esfuerzos que realizan los municipios para evitar este tipo de situaciones, que muchas veces dejan saldos mortales.
“Los turistas deben entender que cuando les advertimos acerca de la crecientes o de ciertas imprudencias, como lanzarse de las piedras sin conocer los ríos, no deben tomarlo en chiste o a la ligera, porque luego suceden los accidentes y todos nos lamentamos”, cerró el efectivo de Defensa Civil de la comuna de Cabalango.