La muerte de Jonathan Romo, ocurrida en julio de 2022 en la comisaría de La Falda, generó una gran pólemica sobre el accionar policial y terminó con la remoción de varias autoridades de la policía de la provincia de Córdoba, incluso la figura del ministro de seguridad, Mosquera, estuvo en crisis por aquellos días.
Por la muerte del joven de 35 años fueron acusados los policias que intervenieron en su detención, y el abogado querellante, Luis Galli, indicó que las pruebas demostraban que los efectivos sabían lo que hacían y que golpearon a Jonathan hasta matarlo. La autopsia también lo determinó, ya que le informe forense explicita que la muerte fue por asfixia mecánica.
En las ultimas horas, el juez de Control de Cosquín Ramiro Núñez advirtió que, con los datos recolectados, “no existe mérito para acusar ni tampoco para sobreseer” a los policías acusados por el homicidio, por lo que devolvió el expediente a la Fiscalía de Instrucción para que profundice la investigación.