Se dieron a conocer audios que dan prueba de cómo la secta de Villa Crespo “dopaba” a sus alumnos, con un coktail recetado por sus integrantes, que lo llamaban “cura de sueño”.
Por la causa, también fueron detenidos Jorge Navas y Luis Mario Romero, quienes recetaban estas drogas a sus víctimas.
La secta de Villa Crespo funcionaba con una fachada de una escuela de yoga y era liderada por Juan Percowicz, de 84 años. En ella se “dopaba” a los alumnos con somníferos, a fin de poder controlarlos mejor. Las recetas estaban enmarcadas bajo lo que sus integrantes llamaban como “la cura de sueño”, un “tratamiento” que llevaban a cabo.
Esto servía para dopar, “disciplinar y aleccionar” a aquellos fieles que se veían más reacios de seguir los lineamientos que los integrantes de la secta les imponían.
El lugar donde se realizaban estas acciones era en la “clínica” de la calle Guarda Vieja 4072, CMI Abasto. Dormían a las personas durante varias jornadas y solamente eran despertados para alimentarlos.
Quien coordinaba todas estas acciones era Alicia “La Doqui” Arata, ya detenida en el operativo, que está a cargo de la División de Trata de Personas de la Superintendencia de Investigaciones Federales de la PFA, que dirige Ricardo Juri.
Además de los audios encontrados, también la gran cantidad de psicofármacos secuestrados en los allanamientos dan cuenta de lo que sucedía en el lugar. Las escuchas telefónicas son otra arista más para las pruebas.
“Siento que me voy a volver loca”: el audio de una de las víctimas de la secta de Villa Crespo
TN tuvo acceso a uno de los audios que probaría el sometimiento que sufría una de las víctimas al ser dopada. En las escuchas se lo menciona a Luis Mario Romero, uno de los psiquiatras detenido.
Una de las primeras voces que surge en el audio es la de Alicia “La Doqui” Arata, donde ella hace referencia de otra “discípula” de Percowicz, Marcela “La Leona” Sorkin.
“Doqui”: “Me dijo: ‘Hablé con Juan, le conté todo lo que me pasa’. Ella me decía principio y yo le completaba la frase porque hace años que trabajamos juntas y conozco, pero...”.
Continuó: “Me dijo ‘volví a llamar hoy a Romero y le expliqué, pero no quiero que él me deje estúpida. No quiero que se me desconecte el cerebro, pero mi cuerpo me está estallando. Siento que me voy a volver loca’”.
“Bueno, son un montón de cosas, cómo le hablas a este pibe de ‘yoes’. Juan me pidió que le expliques vos a Romero. Yo ya le expliqué, pero no puedo...”, cerró “Doqui”.
Por “yoes” era una de las palabras que usaban los integrantes de la secta para referirse a los impulsos de aquellos “pacientes” que cuestionaban lo que la Escuela de Yoga de Buenos Aires les imponía. Ante esto, debían ser “trabajados”, tal el caso de “La Leona”.
Los propios integrantes de la secta sabían que el “tratamiento” les podía causar problemas cognitivos, como queda reflejado en el audio anterior.
En la investigación resta definir la cantidad de “pacientes” que fueron tratados en la clínica, además de sus identidades y sus estados de salud.