Para la querella representante de la familia de Emmily Rodrigues Santos Gomes (26), la modelo brasileña que murió al caer desde el sexto piso de un edificio de Retiro, tanto el imputado Francisco Sáenz Valiente (52) como las tres mujeres que declararon como testigos mintieron: todos dijeron que no hubo sexo pero en el departamento se encontró un preservativo usado y un kit de lencería erótica.
“El hallazgo de un preservativo usado en el lugar del hecho en principio contradice o descarta las versiones del propio imputado y de sus amigas, quienes manifestaron que esa noche no hubo ninguna actividad sexual”, señaló a Télam el abogado Ignacio Trimarco, quien representa a los padres de Emmily.
Las mujeres que estuvieron esa noche fueron Lía Figueroa Alves, que se retiró al ver alterada a Emmily; la cubana Dafne Santana, quien también se fue antes de que Emmily cayera; y la médica brasileña Juliana Magalhaes Mourao, única testigo presencial del hecho.
“Si las testigos que se fueron antes, es decir Lía y Dafne, no vieron ninguna actividad sexual, deberíamos entender que cuando quedaron Francisco y Juliana fue cuando se usó ese preservativo y surge el interrogante de si esto fue así, por qué no lo relataron ni en su testimonial ni en su indagatoria”, enfatizó el letrado.
Un detalle no menor es que la víctima cayó “completamente desnuda”. “Se abre una hipótesis: que a Emmily le hayan suministrado drogas, que hayan intentado abusar de ella sexualmente y que en algún momento ella se resistió y ahí comenzó su ataque de furia, nervios y excitación donde pidió ayuda a la Policía y, en función de eso, se produce su muerte”.
Cómo está la causa
Para el letrado querellante este caso debe tratarse bajo “el protocolo de investigación de la Unidad Fiscal Especializada en Violencia contra las Mujeres (UFEM), que indica que en toda investigación de la muerte violenta de una mujer, se considerará la posibilidad de que haya habido una violencia sexual anterior o posterior a la muerte”.
Este martes se vence el plazo para que el juez de la causa, Martín Del Viso, del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 31, resuelva la situación de Sáenz Valiente: si se lo procesa, si lo sobresee o si le dicta una falta de mérito.
Sáenz Valiente declaró por segunda vez el viernes pasado a pedido del fiscal de la causa, Santiago Vismara, y de la titular de la UFEM, Mariela Labozetta, quienes le ampliaron la imputación y, además de la figura del “femicidio”, lo acusaron también por “haber facilitado estupefacientes”. También se agregó la “tenencia ilegal de un arma de guerra de uso civil condicional”, por una escopeta secuestrada en su casa sin la debida autorización.
Rafael Cúneo Libarona, abogado del empresario Sáenz Valiente, dijo que el imputado negó haber suministrado de manera deliberada cocaína y tuci a Emmily. No obstante admitió que había droga sobre una mesa de la que él venía consumiendo desde la medianoche.
En tanto, la fallecida esa noche consumió alcohol, marihuana, cocaína y tuci (“cocaína rosa”, aunque su único parecido es la presentación en polvo).
Por otro lado, Sáenz Valiente les envió a los padres de Emmily una nota manuscrita desde la alcaidía donde está preso, en la que aseguró que la caída de la joven fue “accidental”, que él hizo “todo lo posible” para evitar que ella “salte por la ventana” y que espera que se “aclare” su “inocencia”.
Cómo fue la muerte de Emmily
La noche del miércoles 29 de marzo, Emmily fue a cenar al restaurante Gardiner, de Costanera Norte, con Magalhaes Mourao y Santana, de allí fue al bar Isabel, de Palermo, y finalmente la madrugada del jueves 30 fue al departamento de Sáenz Valiente en el sexto piso del edificio de la calle Libertad 1542, en Retiro.
De acuerdo a los investigadores, tras una madrugada de excesos, Rodrigues sufrió un ataque de nervios y a las 9.18 terminó cayendo por una ventana desnuda al patio interno del pulmón de manzana del edificio, en una muerte que la Justicia intenta dilucidar si se trató de un homicidio o de un suicidio en el marco de algún tipo de ingesta de estupefacientes.