Actualmente, para aprobar el examen práctico para obtener la licencia de conducir en la Ciudad hay que realizar correctamente seis maniobras en un circuito cerrado. Pero próximamente la prueba se hará en la calle, en condiciones reales.
En diciembre pasado, la Legislatura porteña votó la Ley Integral de Convivencia Vial, que incluye este cambio. Además, esta Ley dispuso sacarles el registro hasta por dos años a quienes den positivo en los controles de alcoholemia, medida vigente el 1° de febrero.
Si bien no está definido cuando se comenzará a tomar el examen bajo la nueva modalidad, el Gobierno porteño ya adjudicó a la empresa Keko S.A. la licitación para contratar y tercerizar autos de doble comando, que son los que se utilizarán para que el aspirante rinda. Con estos vehículos, en caso de peligro el examinador podrá tomar el control del auto. El 70% de la flota será con caja manual y el 30% tendrá caja automática.
Por otra parte, las autoescuelas ya están habilitadas a enseñar a conducir en las calles porteñas (solo en zonas autorizadas). Asimismo, los instructores de las academias serán formados por el Gobierno porteño, con el fin de profesionalizar el rubro.
Cómo será la nueva prueba para obtener el registro
Con el cambio de modalidad, la exigencia del examen aumentará. El aspirante será evaluado en función de cómo se desempeña en situaciones reales del tránsito. Si bien será dentro de un circuito seguro, deberá interactuar con otros vehículos, peatones, ciclistas y los imprevistos propios de la calle.
La tradicional lista de seis pruebas (dar la vuelta a una rotonda en marcha atrás, retener el embrague en una subida, estacionar, hacer cambios de marcha, pasar un cruce ferroviario y circular en zig zag entre conos) será eliminada. Ahora, la habilidad para realizar las maniobras con el auto no será el único factor que se tomará en cuenta: técnica de manejo, el respeto por las normas y la convivencia con otros actores del tránsito serán parte fundamental de la evaluación.
La pista en Roca, donde se toman exámenes, seguirá operativa, pero solamente para quienes tramitan la licencia de conducir para motovehículos o transporte de carga, que realizarán su examen en un circuito cerrado. Mientras tanto, la otra pista que hay en el predio, que es la de aprendizaje, continuará abierta para todos.
Desde el Gobierno de la Ciudad explican que tomar el examen práctico de conducción en las calles es una modalidad que se utiliza en numerosos países, como Francia, Finlandia, Hungría, Holanda, España, Austria, Irlanda, Alemania, Italia, Japón, Grecia, Suiza y Lituania
Examen teórico, también más dificultoso
Por otro lado, habrá un cambio en cuanto a los cursos virtuales. Al igual que ya lo hacen quienes renuevan su licencia, los que la tramiten por primera vez deberán hacer un curso virtual en lugar de presencial.
Será importante prestar atención a esas clases virtuales, porque el examen teórico también será más difícil. Las preguntas pasarán de 30 a 40. Para aprobar habrá que responder el 85% en forma correcta, es decir 34, cuando hoy se pasa con el 75%. Además, el tiempo de examen se reducirá de 45 a 40 minutos.
Asimismo, la exigencia también aumentará en el circuito de postas para el examen psicofísico. En este orden, se estudia incluir nuevos parámetros de aptitud visual. Además, en el Área de Psicología se empezó a implementar una entrevista semidirigida más profunda y a la que se le dedica más tiempo, para detectar indicadores que puedan interferir en la aptitud para conducir. En cuanto al Área Médica, se sumaron preguntas sobre trastornos de sueño y apneas.