Un gendarme y otros dos hombres fueron detenidos tras una persecución en el partido bonaerense de Morón. Los tres se movilizaban en una camioneta, en cuyo interior había tres armas de fuego, chalecos antibalas, precintos y una picana.
Los pesquisas investigan si los sospechosos integraban una banda que estaba por cometer un robo en una casa de El Palomar.
Fuentes judiciales informaron que la situación comenzó por la tarde luego de que un comerciante que llegaba a su casa notó a un grupo de siete hombres que le tomaban una fotografía.
Ante la situación sospechosa, alertó a la Policía y brindó el número de patente de una de las camionetas, la cual fue detenida en la zona tras una breve persecución.
Los efectivos detuvieron la marcha de la camioneta y aprehendieron a los tres sospechosos, entre ellos un integrante de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA) que trabaja en la villa 1-11-14, en la zona porteña de bajo Flores. Los otros detenidos son un hombre de nacionalidad boliviana que hace poco tiempo salió del penal de Sierra Chica por una "portación de arma de guerra" y un argentino que tenía una causa en San Martín por "portación de arma de uso civil".
En tanto, dentro del vehículo, cuyo propietario es el gendarme, hallaron una pistola calibre .40 y dos 9 milímetros, una de ellas provista por la GNA. Además, había chalecos antibalas, esposas, precintos, una picana y $450.
Los detenidos, quienes se negaron a declarar, fueron imputados por el delito de "tenencia de arma de guerra" por la fiscal de la causa Adriana Suárez Corripio, quien constató que el efectivo había estado dos años en "disponibilidad" por una situación similar.