La cantidad de operaciones de compraventa de inmuebles registró en agosto una caída de 45,9% en la ciudad de Buenos Aires respecto de igual mes del año pasado, debido a las restricciones que enfrenta la actividad por la pandemia de coronavirus.
A pesar de esta caída, desde el Colegio de Escribanos porteños señalaron que agosto fue el mes de mayor actividad del año, ya que en los meses anteriores el descenso fue superior al 60% interanual.
De acuerdo con información brindada por la entidad porteña, durante el octavo mes del corriente año se concretaron 1.604 operaciones, con una caída interanual del 45,9%, y con un monto involucrado de 13.360 millones de pesos, 41,2% menor al año anterior.
El monto promedio por escritura en pesos en agosto fue de $8.329.273, con una suba interanual de 8,6%; mientras que en dólares el monto promedio fue de US$ 107.557, con una baja interanual de 23,4% en base a una cotización promedio del dólar de $77,44. En tanto, los actos subieron 179,9% respecto de julio, cuando se habían concretado 573 escrituras de compraventa.
"Agosto fue el mes de mayor actividad del año, pero de un 2020 muy especial. Si lo miramos en perspectiva son 27 meses de caída interanual de forma consecutiva y ocho meses que evidencian un descenso de más de 60% sobre el 2019, que ya había sido el peor registro que teníamos", dijo el presidente del Colegio de Escribanos, Carlos Allende, en un comunicado.
Agregó que "los nuevos esquemas cambiarios generarán quizás un poco más de enfriamiento, pero entendemos que prácticamente ya era complejo acceder a los dólares desde antes de la medida".
Por su parte, el prosecretario del Colegio, Ricardo Blanco Lara, dijo que creen "que es un momento de muchísima dificultad porque si bien hubo mejoría en agosto respecto de julio, no nos olvidemos que julio había estado muy detenido". "Hicimos ocho mil escrituras en lo que va del año, cuando en un año promedio hacemos entre cinco y seis mil mensuales", detalló.
Acerca del cepo, Blanco Lara consideró que "la situación no va a ser distinta al anterior cepo cambiario porque la gente que tiene que acceder a una vivienda y poner una cantidad de dólares para el inicio de la operación no iba a llegar tampoco".
"De cualquier manera -agregó- hoy creemos que la compraventa de viviendas se va a seguir haciendo en dólares. Tal vez lo que es la vivienda a estrenar o en pozo posiblemente sea con algo de dólares en efectivo y cuota en pesos, como ha sido en los últimos dos o tres años atrás".
En tanto, analizó que con respecto a la vivienda familiar "creemos que solamente va a poder comprar quien tiene los dólares atesorados o viene de una venta y se quieren agrandar o achicar y con esos mismos dólares compra la propiedad, ya que el crédito es prácticamente nulo".
Hubo 91 escrituras formalizadas en agosto con hipoteca bancaria, por lo que la caída en este aspecto fue de 71,9% interanual, y los primeros ocho meses del año acumulan una baja de escrituras con crédito de 64,1%.
Con información de Télam