Desde el jueves, cuando comenzaron a regir penas más fuertes para quienes violen la restricción de circular en cuarentena, fueron retenidos 55 autos en la Ciudad de Buenos Aires y un total nacional de 938, de entre los más de 200.000 requisados.
En Ciudad, los autos y motos secuestrados quedaron en las playas de estacionamiento donde se llevan habitualmente los coches acarreados por la grúa. Del Gobierno confían en que no colapse la capacidad de las mismas.
"Esta medida se acaba de tomar y hay muchas cuestiones que debemos ir resolviendo sobre la marcha. Es posible que cada municipio deba alojar en sus playas de estacionamiento a los vehículos de acuerdo al lugar en el que fueron secuestrados", dijeron a Clarín.
Mientras, los infractores quedan con una causa penal abierta y se exponen a penas de hasta 15 años de prisión. Además, no podrán recuperar sus vehículos hasta el fin de la cuarentena.
El personal policial también retiene "los documentos habilitantes para la circulación, las llaves y todo otro elemento mecánico o electrónico necesarios para la puesta en marcha y funcionamiento del vehículo utilizado en la comisión del delito".
Los detenidos hasta el jueves fueron 6191 personas y se secuestraron 938 vehículos en todo el país. Además se demoró a 201.913 personas y se controlaron 206.716 vehículos.
Los vehículos retenidos por Gendarmería, Prefectura y las policías Federales y de Seguridad Aeroportuaria fueron aquellos cuyos conductores no estaban autorizados a circular desde que entró en vigencia el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio, hace una semana.
"Esta medida fue adoptada en el marco del endurecimiento de los controles que se llevan a cabo para cumplir con el aislamiento obligatorio de las personas, a fin de evitar el avance del virus COVID-19", dijo un comunicado.