Una auténtica persecución de película se dio este domingo entre los barrios de Nueva Pompeya y Flores, la cual concluyó con un ladrón detenido tras darse a la fuga en un auto robado.
El vehículo, conducido por un adolescente armado, era un Peugeot 208 gris y llamó la atención de dos oficiales de la División Motorizada de la Dirección de Seguridad Urbana cuando se detuvo en el semáforo de la esquina de las avenidas Sáenz y Rabanal.
Cuando verificaron que la patente concordaba con la de un auto robado, los efectivos dieron la voz de alto, el sospechoso se dio a la fuga y empezó la cacería.
Fueron cuarenta cuadras por las avenidas Caseros y Carabobo a toda velocidad, hasta que a la altura de Balbastro el delincuente chocó contra otro auto en el que iba una familia.
En el intento de un nuevo escape, el ladrón fue aprehendido tras ser rodeado por una gran cantidad de policías.
El adolescente tenía un revólver calibre 32 largo con la numeración limada.
Quedó detenido en la Comisaría 38 y fue puesto a disposición del Juzgado de Menores Nº 1, a cargo de Juan Manuel Videl Mauris, por atentado y resistencia a la autoridad, averiguación de robo, encubrimiento y portación ilegítima de arma de fuego.