Quienes pasean a sus perros por la Plaza Almagro denuncian que, desde hace un tiempo, alguien arroja pastillas venenosas y vidrio molido en el único sector con pasto en el que está permitido ingresar con animales. Los vecinos sospechan que detrás de esto hay alguien que odia a los perros, y que no quiere que sean paseados en este lugar.
Primero, el 9 de febrero, se encontraron pastillas redondas y de color salmón. Mariano, uno de los vecinos, habló con Clarín y contó que "las habían desparramado inteligentemente. Las juntamos, llenamos tres bolsitas y fuimos a hacer la denuncia. Y cuando volvimos, habían vuelto a tirar pastillas".
El joven, que hizo su denuncia en la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N° 40, explicó que "hay un canil, pero ahí van los perros de raza grande, que pueden lastimar a los más chicos. Los que tenemos perros chicos estábamos limitados a un sector de cemento alrededor del mástil. Pero como en ese lugar a veces jugaban picaditos de fútbol, nos dejaron ir a un espacio detrás de la cancha y de la calesita, donde hay un pedazo de pasto".
Las pastillas fueron encontradas en ese lugar. Al día siguiente de la primera denuncia, los comprimidos volvieron a aparecer y los vecinos llamaron al 911. Mariano relató que agentes de la Policía de la Ciudad hicieron un rastrillaje, secuestraron las pastillas y las llevaron para analizar. Sus sospechas indican que algunas veces tiran psicofármacos y otras veneno para ratas.
El viernes 21 de febrero, el sector volvió a amanecer lleno de comprimidos, y fue la guardiana de la plaza quien hizo la denuncia. Y este lunes feriado de Carnaval, los vecinos encontraron vidrio molido. El caso quedó a cargo de la Fiscalía N° 25 de la Ciudad.
