En la tarde del jueves, un llamado al 911 alertó sobre un femicidio en Floresta. La víctima fue María Lorenza Salinas, una mujer argentina de 33 años, madre de dos niños y una niña, que hasta hace 15 días tenía un botón antipánico pero que lo devolvió a la Justicia alegando que ya "no lo necesitaba más". El femicida, Basra Parminder, su marido y padre de sus hijos, un hombre de 36 años de nacionalidad india.
Esta medida de seguridad había sido entregada a la víctima en septiembre pasado por la División Monitoreo de Alarmas Fijas y Móviles de la Policía de la Ciudad tras una orden emitida por la Justicia. Pero el 31 de octubre la mujer lo regresó sin imaginar que dos semanas más tarde Parminder le quitaría la vida en su habitación luego de efectuarle un corte en el cuello y golpearla, con sus hijos dentro del departamento.
El hombre fue quien llamó a la policía, confesó el crimen por teléfono y, luego, intentó suicidarse sin éxito. Cuando llegó el móvil policial, él les abrió la puerta, volvió a contar lo sucedido y fue detenido.
Mientras sucedía todo esto, los tres niños fueron llevados a la casa de un vecino. Habían convivido casi seis horas con el cadáver de su mamá tendido sobre la cama. Fueron asistidos por miembros del cuerpo de psicólogos de la fuerza porteña.
"El sujeto -por el asesino- se encontraba en la planta baja del edificio, donde ratificó los dichos al 911 por lo que se lo detuvo y se ascendió al piso aludido encontrando a la mujer sobre la cama matrimonial de cubito dorsal con un aparente estado de deceso de unas 6 horas dadas las condiciones del cuerpo", informaron fuentes policiales.
El femicida alegó que una supuesta infidelidad de su esposa lo habría llevado a cometer el crimen. Pero, más allá de las excusas, este es el séptimo femicidio que se comete en una semana en nuestro país, y que dejó a tres criaturas más sin su mamá.
Tras cometer el femicidio, Parminder presentaba además heridas en el cuello, por lo que la policía supone que en algún momento de las cerca de cinco horas que pasaron hasta que dio aviso a la policía, intentó suicidarse. Por este motivo, tras ser detenido fue derivado al Hospital Piñero.
En el lugar del hecho intervino la Unidad Criminalística de la Policía de la Ciudad. Se labraron actas por "femicidio" e intervino el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional n°40, a cargo de la Doctora Paula González.