Gina Certoma, la joven oriunda de Quilmes que fue rociada con alcohol y prendida fuego por su novio, fue dada de alta tras pasar cuatro meses internada en el Hospital Alemán.
"Hace cuatro meses no nos imaginábamos estar viviendo esta situación, aunque la deseábamos. Pero no sabíamos que era posible y la verdad es que todos nosotros y Gina estamos muy contentos", contó Ariel Certoma, hermano de la joven. Luego, agregó: "lo primero era que Gina estuviera bien clínicamente, y eso ya pasó. Ahora sabe que tiene que iniciar una nueva etapa, que tiene que ver con volver a la sociedad",
El hecho ocurrió el 3 de enero en Quilmes. Su novio, Ezequiel Fariña, quedó detenido luego de rociarla con alcohol y prenderla fuego.
La noche del hecho Gina, desesperada, salió de la casa para pedir ayuda, mientras el hombre repetía una y otra vez que se lo había hecho ella sola: "Me quemó él, me quemó él", fue el grito desesperado de la mujer ante los vecinos, que rápido llamaron a la policía.
En un estado desesperante y con peligro de vida inminente ingresó el Hospital Alemán ese mismo día. Ahí estuvo internada todo este tiempo. Alberto Bolgiani, jefe de Servicio del Centro de Excelencia para Asistencia de Quemaduras (CEPAQ), explicó que durante su internación, "Gina recibió distintos procedimientos clínicos quirúrgicos que permitieron la remoción de su piel quemada y la recuperación con expansión de su propia piel con técnicas de avanzada. Para ello se aplicaron cremas 'inteligentes' que degradan el tejido dañado y preservan el tejido sano, además de la utilización de 'piel artificial' para cubrir superficies afectadas".