Trabajadores del Sanatorio del Sol interceptaron a la gobernadora electa, Arabela Carreras en un acto en el Centro Cívico para pedirle que se involucre en la situación que afecta a 275 trabajadores en relación de dependencia y médicos.
El delegado de ATSA, Lucas Maliqueo invitó a Carreras a una reunión para conversar sobre los empleados afectados. La gobernadora electa contestó que debían coordinar con su agenda, además aclaró que "es la primera vez que se acercan a mi persona". Por otra parte, una trabajadora del sanatorio afirmó que funcionarios municipales los amenazaron para que no critiquen al gobierno o no obtendrían resultados, sin embargo Carreras no brindó comentarios al respecto.
El conflicto en el sanatorio lleva 70 días, y la mandataria electa aseguró que "las autoridades provinciales han estado poniendo todo de su parte para intervenir en este conflicto que es de una empresa privada y que nos tiene a todos preocupados, no solo por la situación de los trabajadores, sino también por la salud de la ciudad".
En este sentido, agregó que hay "voluntad del gobierno provincial y disponibilidad de fondos públicos en calidad de préstamo". Aunque resaltó que el gobierno no puede disponer de fondos públicos "si no están las garantías correspondientes para su devolución". Según publicó Río Negro.
Gentileza Río Negro.
