"Acabo de perder un rollito con $10 mil. Hice desde Primero de Mayo y Belgrano, doblé por San Martín hasta Burgos y subí en un remis. Llego a la esquina donde tenía que pagar mi alquiler y no encontré el dinero", relató Daiana Tapia en Facebook la mala suerte que tuvo el último lunes cuando iba a pagar su alquiler. "Volví a pasar varias veces por ese lugar, pero no encontré nada", relató la azuleña en diálogo con Vía Azul.
La joven, que se hizo conocida en la ciudad por reciclar mochilas y donarlas para las familias más necesitadas, lo publicó para ver si lograba recuperar la plata. "No encontré el dinero. Cuando volví a casa muda de la tristeza que sentía, lo único que hice fue publicar en mi muro de Facebook si alguien había encontrado el dinero por que lo necesitaba con suma urgencia y dejé el.celular sin esperanzas de encontrarlo . A los pocos minutos empieza a sonar mi celular y no entendía por que tanto. Creí que me llamaban por que encontraron el dinero, pero no era gente que quería colaborar conmigo, me recordaban de la colecta que hago cada año y sentían la necesidad de darme una mano esta vez", relató la joven.
Sorprendida por la reacción de la gente, la joven cuenta que al principio no quiso saber nada con recibir ayuda. Sin embargo, "después de tantos mensajes me hicieron entender que así como yo los ayudé tenía que aceptar su ayuda en este momento y que un poco me lo gane por la garra que siempre le pongo a las colectas que hago siempre".
Tras conseguir el dinero y poder pagar el alquiler, la azuleña volvió a Facebook y le agradeció -emocionada- a todos los que decidieron ayudarla: "Bueno quiero contarles que ya conseguí el dinero que ayer perdí. Quiero agradecer a todos los que me llamaron hasta recién y me acercaron dinero, nunca fue mi intención pedir nada, sólo quería recuperar mi dinero hasta que me crucé con gente muy solidaria y me dio terrible mano. Ayer quedé muda de la angustia y cuando empecé a recibir tantos mensajes de gente que en algún momento yo también ayude me llenó el corazón de alegría por que entendieron todo. Agradecida total con la vida por rodearme de gente con un corazón igual al mío".
LA SOLIDARIDAD TIENE PREMIO
Desde hace dos años, Daiana inició una movida solidaria que se volvió muy conocida entre las familias más necesitadas de Azul: la joven junta mochilas, las recicla y las regala antes del inicio de las clases.
"Primero empecé con una feria solidaria de ropa y fue ahí donde vi que era mucha la necesidad de la gente, en ese momento no me quedé tranquila y pensé en todos lo nenes que no tienen la posibilidad de tener una mochila nueva o en condiciones para empezar las clases y se me ocurrió, lo publiqué en facebook y la respuesta de la gente fue muy buena", contó la joven en enero de este año.