Hay acciones que definen el futuro de una sociedad, y estas que sucedieron en el Balneario Municipal presagia que a los más pequeños de la familia les queda un camino complicado. ¿En qué momento decidís que destruir las cosas de todos es una buena idea?, ¿en qué momento decidís que esa acción debe ser festejada por tus amigos?.
Días atrás volvieron los violentos a destruir el patrimonio de Arroyito, si porque es de todos y es parte de Arroyito. Los “desconocidos de siempre” violentaron un candado y destruyeron un asador y una mesa de cemento que generalmente se usan para “asar” y para luego sentarse a comer el asado que hiciste antes, pero parece que algunos no conocen de definiciones en el diccionario.
Santiago Ferreyra comentaba “no lo podemos solucionar, sucedió en el Balneario, frente a la Oficina de Turismo, nos rompieron asadores, mesas, el candado de ingreso al playón central que es peatonal. Se que no vamos a solucionar mucho, pero estamos todos juntos en cuidar el Balneario”.
Esto es lo que sucede cuando la educación está ausente en un hogar, o cuando estos actores violentos se presentan de una manera y en la soledad, apoyados por otros similares, se muestran como son.
