Tensión con los Estados Unidos: así es el submarino nuclear que navegó en el Atlántico Sur

El buque estadounidense Greeneville es considerado nuclear no porque traslade armamento de ese tipo, sino por su propulsión, que le permite desplazar a gran velocidad.

Tensión con los Estados Unidos: así es el submarino nuclear que navegó en el Atlántico Sur
La propulsión está cimentada en un reactor nuclear S6G, un modelo desarrollado por la empresa General Electric (GE).

Tras la polémica desatada por la presencia de un submarino estadounidense con apoyo británico en el Atlántico Sur, el excanciller Jorge Faurie se refirió a la situación que despertó “gran preocupación” en el Gobierno y la adjudicó a un claro mensaje de la potencia al país, “por no haber permitido”, días atrás, que el buque Stone de la Guardia Costera ingresara en aguas argentinas.

El submarino Greeneville de los Estados Unidos es considerado “nuclear” no porque traslade armamento de ese tipo, sino por su propulsión, que se ejecuta a base de reactores nucleares. Se puede desplazar a gran velocidad y tiene un poderoso armamento.

La propulsión está cimentada en un reactor nuclear S6G, un modelo desarrollado por la empresa General Electric (GE) especialmente para los submarinos de clase Los Ángeles.

Es el único buque de la armada de los Estados Unidos que fue nombrado en honor a la ciudad de Greeneville.
Es el único buque de la armada de los Estados Unidos que fue nombrado en honor a la ciudad de Greeneville.

Se trata de un reactor de 165 megavatios que impulsa dos turbinas de 26 megavatios. Este modelo posibilita tomar una velocidad de 37 kilómetros por hora, tanto en la superficie como en inmersión.

Además, cuenta con cinco sensores: uno pasivo BQQ-5, otro de detección BQS-15, un radar de control de fuego WLR-8, un activo WLR-9 y uno goniómetro de rádio BRD-7. Tiene un desplazamiento de 6.000 toneladas en superficie y 6.927 sumergido.

Otro de los fuertes de la nave es su armamento. Tiene 12 lanzadores de misiles BGM-109 Tomahawk y cuatro tubos de torpedos de 21 pulgadas y torpedos MK-48, los cuales fueron diseñados para hundir submarinos profundos de propulsión nuclear y buques de superficie de alto rendimiento.

El uso de energía nuclear no solo permite a los submarinos desplazarse a gran velocidad.
El uso de energía nuclear no solo permite a los submarinos desplazarse a gran velocidad.

Con 110 metros de longitud, el USS Greeneville (SSN-772) es el único buque de la armada de los Estados Unidos que fue nombrado en honor a la ciudad de Greeneville, situada en el estado de Tennessee.

Fue autorizado el 14 de diciembre de 1988, iniciado en febrero de 1992 y botado en septiembre de 1994. Comenzó su operación el 16 de febrero de 1996, cuando partió del puerto de Norfolk, en Virginia.

El uso de energía nuclear no solo permite a los submarinos desplazarse a gran velocidad durante largos períodos de tiempo, sino que también posibilita que permanezcan más tiempo sumergidos, al no estar obligados a recargar aire en la superficie.

El Greeneville fue protagonista de tres incidentes en mar, dos en 2001.
El Greeneville fue protagonista de tres incidentes en mar, dos en 2001.

En contrapartida, son naves más proclives a accidentes graves, al involucrar ese tipo de energía. Por caso, el Greeneville fue protagonista de tres incidentes en mar, dos en 2001.

Mientras realizaba un simulacro de ascenso a superficie de emergencia, impactó contra un pesquero japonés y le causó su hundimiento en menos de 10 minutos, provocándole la muerte a nueve de sus tripulantes. Meses después, encalló mientras entraba en el puerto de Saipán. Al año siguiente, colisionó con el USS Ogden (LPD-5) durante una transferencia de personal en Omán y originó la pérdida de algunos galones de combustible.

La polémica de su navegación en las costas argentinas se conoció a partir de las fuerzas submarinas americanas, que expresaron: “Una aeronave británica de las Islas Malvinas, territorio británico independiente, colaboró recientemente con el USS Greeneville (SSN 772) en las aguas abiertas del océano Atlántico, demostrando el alcance global de las fuerzas de ambas naciones”.

La polémica de su navegación en las costas argentinas se conoció a partir de las fuerzas submarinas americanas.
La polémica de su navegación en las costas argentinas se conoció a partir de las fuerzas submarinas americanas.

Poco después, el canciller Felipe Solá emitió un fuerte comunicado señalando que el Gobierno expresaba “su grave preocupación” y le pedía información a la Embajada de los Estados Unidos, al tiempo que le recordaba acuerdos de Naciones Unidas sobre el conflicto de soberanía con Gran Bretaña por las Malvinas y acuerdos internacionales contra las armas nucleares como el de Tlatelolco.

En las últimas horas, el ex canciller Jorge Faurie relacionó la navegación del submarino Greeneville con la reciente negativa del Gobierno a participar de ejercicios conjuntos con una patrulla de la Guardia Costera estadounidense. Lo consideró un ejercicio como parte de la “percepción estratégica de los Estados Unidos y de la defensa de sus intereses en esta región, en especial en el marco de su rivalidad de superpotencia con China”.