El día después de la que la Mesa Nacional de Juntos por el Cambio calificara de “fracaso” a la política sanitaria gubernamental frente al Covid-19, la alianza opositora dobló la apuesta. Patricia Bullrich, presidenta del PRO y representante del ala dura de la coalición, llamó desde Bariloche “a resistir” las nuevas medidas de confinamiento.
“Vamos a resistir en la medida en que sea totalmente irracional. (El encierro) de 23 a 5 va a destruir un montón de negocios. ¿Van a seguir destruyendo restaurantes? Que lo hagan, pero la realidad es que la economía Argentina no resiste más”, dijo la exministra de Seguridad del exgobierno de Mauricio Macri.
El martes pasado la plana mayor de Juntos por el Cambio emitió un comunicado crítico a la gestión de la pandemia de parte del gobierno de Alberto Fernández. En el texto se habla de “fracaso de la estrategia sanitaria del gobierno nacional” al “insistir con restricciones excesivas y mal calibradas”. También se apuntó a “la falta de vacunas en la escala necesaria”.
El documento de Juntos por el Cambio también fue firmado por los cuatro gobernadores de la alianza. “En la reunión, tanto Horacio (Rodríguez Larreta) como Gerardo Morales y Gustavo Valdés dijimos que alguna medida hay que tomar, pero no estamos de acuerdo con estas cuarentenas estrictas que dañan tanto a la Economía y que no sirven. Hay que tomar medidas inteligentes. Una cosa es cerrar los restaurantes a las 00:30 y otra es a las 22:00, donde hay afectación a la economía”, dijo Rodolfo Suárez, gobernador de Mendoza.
Los gobernadores radicales, en la cumbre opositora del martes en Palermo, mantuvieron críticas moderadas al Gobierno nacional, lejos del calificativo de “fracaso” que resaltó en el comunicado. Los mandatarios provinciales, a diferencia del ala netamente política de la coalición, saben que frente al crecimiento dramáticos de los contagios, los gobiernos provinciales y municipales deben adoptar medidas.
“Puede ser una cuestión de redacción, pero no fue la postura (la de rechazo absoluto) y Horacio lo planteó claramente también en la reunión. Lo que nosotros creemos que es de imposible cumplimiento medidas como las del año pasado, la economía está muy dañada”, explicó Suárez.
“Lo debates hay que darlos. Obviamente, con visiones distintas porque el rol de quien está al frente de un gobierno no es el mismo que tiene aquel que cumple un rol de oposición”, agregó el gobernador.
Más allá de los matices, el ala dura de Juntos por el Cambio está imponiendo sus posturas. Algunas son abiertamente desafiantes. El dirigente Yamil Santoro (cercano a Bullrich) convocó para la medianoche del miércoles a una plaza porteña como medida de resistencia: “A las 23.59, fiesta de la libertad en Plaza Serrano (en Palermo). Traigan sus propios tragos. Todos invitados”, escribió en Twitter.
Desde el gobierno, funcionarios y legisladores salieron a apuntalar las nuevas decisiones. “Hay un grupo de la oposición que está en contra de todo y ahora de las restricciones. El discurso político con un interés electoral de corto plazo. Ahora contra las restricciones, antes en contra de las vacunas. Es una posición cómoda de una oposición, que no es toda, pero que es una oposición irresponsable y que lo que pretende hacer es que nos vaya mal”, dijo el diputado Pablo Yedlin, titular de la comisión de Salud.
Yedlin también le respondió a Bullrich, quien viene bregando para que privados y farmacias adquieran vacunas, explicando que “por ahora, solo los Estados nacionales pueden comprar vacunas porque no hay stocks para privados, como ocurre con otras vacunas. Las farmacias en los Estados Unidos reciben las dosis del gobierno federal”. Ayer, el laboratorio Pfizer comunicó que no vendía vacunas a privados.
La Cámpora también se pronunció sobre la posición de Juntos por el Cambio: “Hoy el mundo atraviesa una nueva crisis por la segunda ola y nuestro país, claro, no está al margen. En ese marco, Juntos por el Cambio dice que rechaza cualquier restricción. Es decir, se niegan a tomar medidas para cuidar a la gente. Semejante afirmación sólo puede partir de mentes perversas que buscan el colapso del sistema sanitario y usan el odio para dividir a la sociedad”, dijo la agrupación que dirige Máximo Kirchner.
“A Juntos por el Cambio el parece mal restringir las salidas nocturnas y los restoranes en la CABA, pero les parece bien dejar sin atención médica programada a todos los adultos mayores en los hospitales públicos”, criticó la titular del PAMI, Luana Volnovich, aludiendo a los problemas que viene soportando la salud pública a cargo del gobierno porteño.
Ayer, en tanto, Mauricio Macri continuó con su agenda política. En Vicente López recibió a “La Territorial”, una agrupación bonaerense del PRO. Entre los visitantes estuvo el diputado Alex Campbell, quien horas más tarde comunicó que dio positivo en un test. Así, Macri pasó a aislamiento “por contacto estrecho”. Campbell ya contrajo el virus el año pasado, y esa oportunidad contagió a María Eugenia Vidal.
Macri aislado, mientras el presidente Fernández, contagiado, dio su discurso sobre las nuevas medidas al aire libre, en la Quinta de Olivos.
Por la Corresponsalía de Buenos Aires