La tarde del sábado vivió un desesperante momento cuando el mediocampista de la selección de fútbol de Dinamarca Christian Eriksen se desvaneció en el pleno partido contra Finlandia durante la Eurocopa. Sin embargo, nadie vivió una mayor angustia que su esposa Sabrina Kvist Jensen que se encontraba en la tribuna.
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Habían pasado 42 minutos del encuentro cuando el lateral de 29 años se desplomó en el estadio Parken de Copenaghue. Rápidamente las cámaras enfocaron a su esposa y su gesto fue desgarrador.
Entre lágrimas y shock, Jensen bajó de la tribuna e ingresó al campo de juego para encontrarse con la preocupante situación. Otros jugadores como el capitán Simon Kjaer y el arquero Kasper Schmeichel abrazaron a la esposa de Eriksen para consolarla.
Allí, el futbolista estaba siendo atendido por los médicos con trabajos de reanimación cardiopulmonar mientras sus compañeros tapaban las cámaras con sus cuerpos. Jensen se acercó con la camiseta de su marido llena de angustia y así se capturó el desgarrador momento.
Alrededor de 15 minutos desde que Eriksen se desplomó fue retirado con respiración asistida, en camilla y tapado con mantas blancas, imágenes que conmocionaron al mundo. Más tarde, la UEFA informó que el mediocampista fue trasladado al hospital Rigshospitalet y se encuentra estable.
“Tras la emergencia médica que involucró al jugador danés Christian Eriksen, se ha producido una reunión de crisis con ambos equipos y árbitros. El jugador ha sido trasladado al hospital y se ha estabilizado”, agregó.
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Eriksen, jugador del Inter de Milán, está en pareja con Sabrina desde 2012 y tuvieron a su primer hijo en junio 2018. En ese período, se tomó una corta licencia durante el Mundial de Rusia para estar presente en el nacimiento. Al volver, anotó un gol contra México y se lo dedicó al pequeño Alfred.
Hace tan solo 7 meses le dieron la bienvenida a su segundo hijo. Antes de su llegada al Inter de Milán, la pareja vivió en Londres durante la estadía del volante en el Tottenham.
